Asia se prepara para recibir a Donald Trump

El presidente Trump se dirige a Asia y nadie sabe a ciencia cierta qué esperar. Trump, quien presume de su imprevisibilidad, se dirige a una región en la que ha puesto décadas de liderazgo económico estadounidense en cuestión.

Desde que asumió el cargo, ha terminado con el acuerdo de libre comercio más grande del mundo, atacado al TLCAN, amenazado con terminar con un pacto con Corea del Sur y describir las relaciones económicas de EU con los principales países asiáticos como “horribles”.

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Así que, ¿qué opinan los funcionarios de la región sobre sus políticas comerciales y su inminente visita?

"Con una cierta alarma, incertidumbre y preocupación”, dijo Deborah Elms, directora ejecutiva del Asian Trade Centre en Singapur, que asesora a gobiernos y compañías. “La pregunta en la mente de todos es, ¿qué propone Estados Unidos?”.

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Lo menos Trump posible

Al deshacer el TPP, un acuerdo masivo de comercio que reunía a 12 naciones, Trump acabó con un acuerdo que le había tomado años a Estados Unidos alcanzar con países como Japón, Australia y Vietnam.

"Sin el TPP, no existe una narrativa de sociedad comercial estadounidense con Asia”, dijo Aaron Connelly, miembro investigador del Instituto Lowy en Sídney.

Trump dejó el campo libre para China, que está impulsando ávidamente el gran proyecto del presidente Xi Jingping para incrementar el comercio a lo largo de las rutas de la seda históricas a lo largo de Asia y más allá.

Al ir en persona, Trump tiene la oportunidad de reafirmar a los aliados nerviosos y establecer una nueva visión para el papel de Estados Unidos en Asia. Pero Connelly y otros expertos permanecen escépticos.

"Mi opinión es que es mejor que Trump pase el menor tiempo posible en Asia, dijo, sugiriendo que las relaciones con países en la región se llevarán de mejor manera por funcionarios gubernamentales estadounidenses de menor rango.

"Las políticas EU-Asia bajo Trump no han sido tan malas como se habría esperado de su campaña”, dijo Connelly, haciendo referencia a sus amenazas para imponer tarifas a China y marcarlo como un manipulador de divisas. Pero mientras más lo involucras en las políticas, mayor es el riesgo de que se vea más como su campaña”.

La situación se complica por el hecho de que los puestos clave para los diplomáticos en Asia que ayudan a promocionar los intereses económicos estadounidenses permanecen vacíos. Las empresas estadounidenses carecen de ayuda para navegar la región y el entendimiento del gobierno de lo que sucede es más débil. Ese es un problema particular frente a una visita de importancia como la de Trump.

"La profundidad del conocimiento sobre Asia Que llega a Estados Unidos es poca en términos de quién está planeando este viaje”, dijo Elms. “Estoy un poco alarmado”.

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'Pagando tributo'

En lugar de perseguir acuerdos regionales amplios, Trump dice que busca pláticas uno a uno con los países. Él promete a los trabajadores estadounidenses que puede alcanzar mejores acuerdos al fijarse en los déficits y superávits del comercio bilateral. Pero ese enfoque no está funcionando tan bien con socios comerciales como Japón.

"Estados Unidos Primero significa que todos los demás vienen al final”, dijo Elms. “No es la mejor estrategia de negociación desde el punto de vista del otro”.

Los líderes asiáticos han seguido la corriente al deseo de Trump de que ellos pregonen lo que están haciendo por la economía estadounidense cuando lo visiten en la Casa Blanca, recitando frecuentemente listas de inversiones que sus países ya planeaban.

"Hay un costo pues esto crea la apariencia de que estos líderes están yendo a Washington y pagando tribute”, dijo Connelly. “Con el tiempo, creo que es un ejercicio verdaderamente corrosivo".

EU sigue siendo 'indispensable'

Mientras tanto, el gobierno chino usa su tiempo visitando otras naciones en la región y hablando sobre las inversiones que realiza.

"China es muy Bueno vendiendo sus relaciones económicas”, dijo Connelly. “Mucho mejor de lo que lo hacen los países occidentales”.

La ironía es que las empresas estadounidenses han invertido mucho más en las economías asiáticas que sus rivales chinos.

"El mercado, capital y tecnología de EU… no puede reemplazarse fácilmente”, dijo Shalendra Sharma, profesora de la Universidad de San Francisco que se especializa en globalización. “La economía estadounidense, con todas sus fallas, sigue siendo indispensable”.

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La distracción de Corea del Norte

El peligro es que Trump dé por hecho la ventaja de EU en lugar de construir sobre ella.

En la ausencia de liderazgo de EU, los gobiernos de la región están impulsando el propio. Los otros 11 países que firmaron el TPP están negociando un nuevo acuerdo que podrían anunciar en una cumbre regional en Vietnam a la que también asistirá Trump.

Pero Trump probablemente se enfoque más en la amenaza nuclear de Corea del Norte durante el viaje. E so podría reducir el riesgo de un desacuerdo sobre el comercio, al menos, por el momento.

"Más temprano que tarde, es posible que se cansará del asunto de Corea del Norte, especialmente una vez que se aclare qué poca influencia tiene”, dijo Gareth Leather, analista de la firma de investigación Capital Economics, en una nota. “Si esto sucede, las tensiones comerciales con China o Corea del Sur podrían estallar fácilmente”.

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