Esta herramienta ya había sido adoptada en otros países europeos y que beneficiará hasta a 2.3 millones de personas, de acuerdo con la agencia EFE. Un 30% de los beneficiarios son mayores de edad.
Según explicó Iglesias, la renta mínima vital garantizará 462 euros al mes (515 dólares) a un adulto que viva solo.
En el caso de las familias, a este mínimo se sumarán 139 euros (155 dólares) al mes por cada persona adicional, adulto o niño, con un máximo de 1,015 euros por hogar (1,130 dólares).
La renta mínima será compatible con otros ingresos, de manera que si alguien tiene un empleo de baja remuneración, recibirá un complemento hasta alcanzar los umbrales previstos en el dispositivo aprobado este viernes.
El Ministerio de Inclusión y Seguridad Social detalló a su vez en un comunicado que con este dispositivo "la renta media garantizada es de 10,070 euros al año por hogar", es decir unos 11,220 dólares.
Las previsiones iniciales del gobierno apuntan a que unas 100,000 familias comiencen a cobrar en junio esta renta mínima, aunque el objetivo final es llegar a 850,000 familias y 2.3 millones de personas, la mitad de ellas niños.
Se podrán acoger personas de entre 23 y 65 años o desde los 18 años con menores a cargo y un año como mínimo de residencial legal en España.
El coste anual para el Estado se calcula en unos 3,000 millones de euros anuales (un 0.24 % del PIB de 2019).