"Como parte de nuestros esfuerzos por la recuperación de 'Estados Unidos primero', el presidente ha decidido suspender ciertos tipos de visados hasta final de este año", dijo un alto funcionario de la Administración estadounidense en una llamada con periodistas organizada por la Casa Blanca.
En este sentido, argumentó que existen compañías en Estados Unidos, como el gigante de entretenimiento Disneyland o la telefónica AT&T, entre otras, que utilizan un mecanismo de subcontrataciones de empleados extranjeros que limitan las posibilidades de trabajo para los nacidos en el país.
Entre los visados afectados se encuentran el H-1B, que está diseñada para ciertos trabajadores cualificados, como los empleados en la industria tecnológica; el H-4, que son para las parejas de estos empleados; así como visados L-1, que están destinados a directivos que trabajan para grandes corporaciones.
Los permisos de empleo H-2B, para trabajadores de los sectores hoteleros y de construcción, y los J-1, que son para investigadores y profesores de investigación y otros programas de intercambio de trabajo, como las becas o las niñeras, también se verán paralizados hasta enero.
En principio, esta medida no afectará a los trabajadores extranjeros que se encuentran ya en Estados Unidos.
Sin embargo, sí impactará a cientos de empresas y miles de personas, ya que en el año fiscal 2019, Estados Unidos otorgó el visado H-1B a unos 130.000 trabajadores; el L-1a 12,000; y el H-2B a más de 98,000 empleados.
El frenazo económico debido al confinamiento aumentó la tasa de desempleo de 3.5% en febrero a 13.3% en mayo.
Frente esta alza del desempleo, el 22 de abril Trump firmó un decreto para limitar durante 60 días la entrega de permisos de residencias permanentes. El anuncio de este lunes extenderá esta limitación hasta el 31 de diciembre.
Estados Unidos sufre el brote de coronavirus más severo de todo el mundo con cerca de 120,000 muertos y más de 2.2 millones de casos.
Con información de AFP y EFE