BERlÍN- Alemania era el alumno aventajado y ahora se ve obligado a cerrar parte del país de nuevo. Alabado por la Organización Mundial de la Salud, después de un primer momento de indecisión en marzo, durante el cual el coronavirus pudo expandirse por todo el país, la política de cierre parcial y test masivos llevó a un control efectivo del número de infectados, que continúa bajando.
Sin embargo, en los últimos días se han dado varios casos de brotes masivos que han hecho encender todas las alarmas ya que, según el virólogo de cabecera de la canciller Angela Merkel y jefe de infectología del hospital universitario Charité, Chrisitan Drosten, “de no encenderse todas las alarmas dentro de un mes podríamos tener un grave problema”, aseguró en su podcast.