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Francia rechaza el acuerdo UE-Mercosur por el aumento de la deforestación

El tratado comercial será insuficiente como una herramienta para que los países sudamericanos asuman mejor el problema climático y la protección de la biodiversidad, indica un informe de expertos.
vie 18 septiembre 2020 11:49 AM
Condiciones
Francia pidió hoy que el acuerdo no conlleve una mayor deforestación, que las políticas de los países del Mercosur sean conformes con el Acuerdo de París, de acuerdo con el primer ministro Jean Castex.

Francia indicó este viernes que sigue opuesta al acuerdo comercial entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur y planteó tres "exigencias", incluidas garantías de que los intercambios no acelerarán la deforestación y el respeto del Acuerdo de París sobre clima.

El gobierno anunció su posición después de recibir un informe de un comité de expertos independientes que alerta de los riesgos medioambientales que supone este acuerdo, a la vez que en Europa crecen las voces reticentes a su entrada en vigor.

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"El nivel de ambición de ese proyecto de acuerdo es insuficiente como herramienta para que nuestros socios comerciales asuman mejor el problema climático y la protección de la biodiversidad, principalmente a través del respeto del Acuerdo de París", indicó el comunicado difundido por el ejecutivo galo.

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Francia trabajará con otros socios de la UE para establecer condiciones medioambientales para reanudar las negociaciones comerciales, señaló la oficina del primer ministro, Jean Castex.

"La deforestación pone en peligro la biodiversidad y altera el clima. El informe (...) confirma la posición de Francia de oponerse al proyecto", tuiteó Castex.

El ejecutivo lamentó en concreto que el acuerdo "no contenga ninguna disposición" para controlar las prácticas de los países del Mercosur en materia de lucha contra esa lacra y condicionó la continuación de las negociaciones al cumplimento de tres "exigencias".

"El acuerdo representa una oportunidad desperdiciada para la UE de utilizar su poder de negociación para obtener garantías sólidas que respondan" a las expectativas "ambientales, sanitarias y (...) sociales de sus conciudadanos", concluyó el comité de expertos presidido por el economista Stefan Ambec.

El informe estima que la deforestación en el Mercosur podría "acelerarse un 5% anual" debido a la superficie adicional de pastoreo que sería necesaria para cubrir el aumento de producción de carne bovina destinada a la UE (entre 2 y 4%).

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Evalúa además "entre 4.7 y 6.8 millones de toneladas equivalentes de CO2" el aumento de emisiones de gases de efecto invernadero que generaría el acuerdo y pone en duda que las "ganancias económicas" compensen "los costos climáticos".

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Las negociaciones que abrieron la puerta a la firma de ese acuerdo de asociación entre la Unión Europea y Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay finalizaron en junio de 2019 en materia comercial y el pasado junio en cuestión de diálogo político y cooperación.

Sus cifras están a la altura de la importancia de ese pacto: 20 años de discusiones, un mercado que engloba a casi 800 millones de personas y un comercio de bienes entre ambas partes que según la Comisión Europea se eleva a más de 80,000 millones de euros (unos 94,400 millones de dólares) anuales.

Tres acuerdos medioambientales

Pero ya en agosto del año pasado, al margen de la cumbre del G7 en la localidad vascofrancesa de Biarritz, Macron había dejado claro que su país no podía respaldar el proyecto de asociación porque las políticas públicas de esos países iban "claramente en contra" del acuerdo climático de París.

El agravamiento de la deforestación de la Amazonía y los desencuentros al respecto entre Macron y su homólogo brasileño, Jair Bolsonaro, acabaron de tensar la relación y de asentar las dudas francesas.

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Sin embargo, "Francia no quiere pararlo todo, al contrario, queremos batir el hierro mientras está candente", indicó a la agencia AFP una fuente del ejecutivo.

Las tres "exigencias" formuladas por el gobierno son: que el acuerdo no pueda en "ningún caso provocar el aumento de la deforestación", que las "políticas públicas del Mercosur sean plenamente conformes con sus compromisos con el Acuerdo de París" y que los productos agroalimentarios importados con acceso preferencial respeten las normas sanitarias y medioambientales europeas.

"De ello depende la coherencia de los compromisos climáticos y medioambientales de Francia y de la Unión Europea y la plena adecuación de la política comercial europea con los objetivos del Pacto Verde presentado por la Comisión Europea en diciembre de 2019", dijo su comunicado.

Los países del Mercosur son importantes productores de cereales, soja y carne de vacuno, sectores en los que Francia tiene también una importante posición.

Estas exigencias francesas no esconden su interés por llegar a implementar un acuerdo con Mercosur: según cifras gubernamentales francesas, las exportaciones galas al Mercosur representan cada año unos 6.000 millones de euros en bienes y 3.000 millones de euros en servicios

El gobierno francés espera que, una vez el acuerdo pueda entrar en vigor, aumenten sus exportaciones de productos agrícolas e industriales, como lácteos, vino, autos, medicamentos y químicos.

Más allá de Macron

Además de Francia, varios países como Bélgica e Irlanda mostraron sus reticencias a seguir adelante y los parlamentos austriaco y holandés lo rechazaron en su estado actual, especialmente, por la deforestación.

Incluso la canciller alemana, Angela Merkel, cuyo país figuró durante mucho tiempo como uno de sus principales impulsores, expresó por primera vez en agosto "serias dudas".

Para que entre en vigor, todos los parlamentos nacionales de la UE deben ratificarlo. Por ahora, el texto podría ser sometido a los jefes de Estado y de gobierno en un Consejo Europeo durante el otoño boreal.

Decenas de ONG se movilizaron igualmente en las últimas semanas en Francia en contra de ese acuerdo.

El colectivo Stop-Ceta, que reagrupa a numerosas ONG, sindicatos y partidos políticos, reclamó el viernes su abandono, juzgando el informe del comité de expertos "implacable".

En concreto, el colectivo reclamó a Macron que haga "en Bruselas lo que afirma en París" y que construya "una alianza de Estados miembros capaz de bloquear el acuerdo desde el momento en que sea sometido a examen en el seno del Consejo Europeo".

Según un reciente sondeo de YouGov llevado a cabo entre más de 5,000 personas en España, Alemania, Francia y Holanda, 3 de cada 4 encuestados desean poner freno al acuerdo si contribuye a la deforestación y perjudica el medioambiente.

Con información de AFP y EFE

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