La ministra de Interior, Priti Patel, anunció en un mensaje la decisión, tomada con base en el criterio del Centro Conjunto de Análisis sobre Terrorismo, órgano dependiente de la agencia de inteligencia nacional MI5.
"Esta es una medida de precaución y no está basada en ninguna amenaza concreta. Los ciudadanos deben permanecer vigilantes e informar a la policía de cualquier actividad sospechosa", detalló Patel.
El primer ministro británico, Boris Johnson, se mostró por su parte "profundamente consternado" por el atentado en Viena.
La policía busca a los responsables prófugos del atentado en Austria
"Los pensamientos del Reino Unido están con los austríacos. Permanecemos unidos con ustedes contra el terror", expresó el jefe de Gobierno en un mensaje en las redes sociales.
Un portavoz de Downing Street, despacho oficial de Johnson, agregó que el Ejecutivo ha ofrecido a Austria la colaboración de expertos británicos en operaciones antiterroristas para colaborar en la investigación del atentado del lunes.
"Somos muy conscientes de la amenaza que supone el terrorismo. Nuestra policía y servicios de seguridad trabajan las veinticuatro horas del día para mantenernos seguros", declaró ese portavoz.