En Rhode Island, el gobernador emitió una orden ejecutiva de "santuario" que limita la cooperación entre la policía local y el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos (ICE), mientras que Texas aprobó una ley que requiere dicha cooperación. De hecho, el condado de Harris tuvo el mayor número de arrestos por ICE de todos los condados durante 2018 y 2019.
Sin embargo, el estudio encontró niveles de ansiedad y de otros síntomas de salud mental similares entre los jóvenes de los dos estados.
“La política más protectora de Rhode Island, entonces, no protegió a los estudiantes de las condiciones de salud mental asociadas con las políticas federales de inmigración, lo que sugiere que el clima político que contribuye a las ansiedades de los estudiantes es de carácter nacional, no regional”, dijo el MPI.
La pandemia de COVID-19, que ha afectado de manera desproporcionada a las poblaciones latinas, y las dificultades latinas asociadas con la crisis sanitaria, han aumentado el estrés de estas comunidades.
“El tamaño de la población de jóvenes latinos y su papel central en la futura fuerza laboral estadounidense hacen que la crisis de salud mental en esta población sea demasiado crítica para pasarla por alto, a pesar de los numerosos desafíos que enfrenta el país a medida que la nueva administración asume el poder”, afirmó el instituto.