Publicidad
Publicidad

La Iglesia católica en Francia abusó de más de 200,000 niños desde 1950

Sacerdotes y religiosos franceses abusaron de 216,000 menores de edad entre 1950 y 2020, ante lo que la institución mostró una “cruel indiferencia”.
mar 05 octubre 2021 12:22 PM
Una estatua de San Antonio de Padua en la iglesia de Saint-Sulpice, en París, Francia.
La mayoría de las víctimas, un 80%, eran niños varones, muchos de ellos de entre 10 y 13 años.

La Iglesia católica francesa abusó sexualmente de más de 200,000 niños en los últimos 70 años, según muestra una investigación publicada el martes, cuyos autores acusan a la institución de hacer la vista gorda durante demasiado tiempo.

La Iglesia habría mostrado "una indiferencia profunda, total e incluso cruel durante años", protegiéndose a sí misma en lugar de a las víctimas de lo que era un abuso sistémico, dijo Jean-Marc Sauve, jefe de la comisión que elaboró el informe.

Publicidad

Sacerdotes y religiosos franceses abusaron de 216,000 menores entre 1950 y 2020, si bien la cifra ascendería a 330,000 si se tiene en cuenta hechos perpetrados por laicos que trabajaron en instituciones religiosas, apunta la Comisión Independiente sobre los Abusos Sexuales en la Iglesia (Ciase) en Francia.

La mayoría de las víctimas, un 80%, eran niños varones, según Sauvé, muchos de ellos de entre 10 y 13 años. La Iglesia no solo no tomó las medidas necesarias para prevenir el abuso, sino que tampoco informó sobre ello y, a veces, puso a los niños en contacto con los depredadores a sabiendas, dijo.

Un reporte señala casos de abuso sexual en la mayor diócesis de Alemania

El papa Francisco “piensa ante todo en las víctimas, con inmenso dolor por sus heridas y con gratitud por su valentía para denunciar” y desea que la Iglesia francesa, “consciente de esta terrible realidad”, “empresa un camino de redención”, reza un comunicado del Vaticano.

Un fenómeno masivo

La respuesta del episcopado francés fue más allá que la del papa. “Mi deseo en el día de hoy es pedirles perdón”, dijo ante víctimas y prensa el presidente de la CEF, monseñor Éric de Moulins-Beaufort, que expresó su “vergüenza” y “determinación a actuar”.

Pero su institución estuvo en el punto de mira del informe, acusada de haber mirado para otro lado, de no haber tomado en serio las señales de alarma y de haber tratado de cubrir a los clérigos pederastas, según el presidente de la comisión, Jean-Marc Sauvé.

Publicidad

Este último acusó a la iglesia católica de "negligencias" y de no atender a las señales de alerta lanzadas durante años por las víctimas.

Sauvé dijo que la escala no tenía precedentes, y que la mayoría de las otras investigaciones sobre los abusos sexuales de la Iglesia católica se centraban en las víctimas identificadas individualmente. Ha habido alrededor de 2,900-3,200 presuntos pedófilos en la Iglesia francesa durante los últimos 70 años, agregó.

El ratio de religiosos agresores ronda el 2.8%, inferior al de otros países que han investigado el fenómeno, como el 4.4% registrado en Alemania o el 7% de Estados Unidos.

Sauvé, católico practicante de 72 años, entregó el informe de más de 2,000 páginas, “una pesada carga tanto en el sentido literal como figurado”, a responsables de la Conferencia Episcopal (EF) y a la Conferencia de Religiosos y Religiosas de francia (Corref), que lo encargaron.

El presidente de la comisión habló de un fenómeno "masivo", reconoció que tanto las víctimas como los agresores identificados son "un mínimo" y apeló a la iglesia a "pedir perdón" e indemnizar a personas que, en su mayoría, arrastran problemas "importantes" de comportamiento sexual y psicológico.

El presidente de los obispos franceses expresó su "vergüenza" por unos hechos que "por su carácter conmociona y por su número abruma".

Publicidad

Pero Moulins-Beaufort pasó de puntillas por la cuestión de las indemnizaciones, que son la principal reclamación de las asociaciones de víctimas, que acusan a la iglesia de mirar para otro lado en ese asunto tras años de haberlo hecho con los casos denunciados.

Así lo expresó el presidente de la asociación La Palabra Liberada, François Devaux, en el origen de la revelación de numerosos casos en Lyon que sentaron en el banquillo de los acusados en 2018 al arzobispo de esa importante diócesis, el ex cardenal Philippe Barbarin, lo que llevó a la Conferencia Episcopal a crear esta comisión independiente.

Una “indiferencia cruel”

"Ustedes deben pagar por todos estos crímenes", lanzó Devaux ante un puñado de obispos y el nuncio papal en Francia, que tuvo que escuchar de boca de esta víctima de abusos en su infancia que el papa Francisco "está ausente" y que la iglesia francesa se escuda en "una estrategia fétida" de indemnizaciones a las víctimas.

Las 485 páginas del informe reflejan un panorama "aterrador", en palabras de Sauvé, que señaló que estos actos no son solo cosa del pasado: "Las violencias sexuales en la iglesia no han sido erradicadas".

Si el 56% de los casos identificados se produjeron entre 1950 y 1969, la caída registrada en los años 70, 80 y 90 (22%) se ha detenido en lo que va de siglo.

Sauvé atribuyó esa bajada a una menor asistencia de los franceses a ámbitos católicos y no a la actuación de la iglesia, que solo a partir de la aparición de escándalos mediáticos comenzó a tomar medidas para combatir la pederastia.

Hasta entonces, denunció, hubo "una indiferencia profunda y total, incluso cruel, con las víctimas", porque todo su esfuerzo iba dirigido a "proteger la institución" y a "mantener a los clérigos en el sacerdocio".

Entre las recomendaciones de la comisión figura revisar el secreto de confesión para que no pueda ser aplicado en caso de la comisión de crímenes, introducir laicos en los órganos de gobierno de la iglesia para evitar que los religiosos acumulen todo el poder, adaptar la formación de los curas o revisar la moral sexual, considerada ahora un tabú en el seno de la institución.

Más escándalos de pederastia

Francia no es un caso aislado. Al menos 3,677 niños fueron víctimas de abusos de religiosos en Alemania entre 1946 y 2014, según un informe de 2018, y, según abogados independientes, se presentaron en Estados Unidos más de 11,000 denuncias.

Otros escándalos estallaron en Chile, Canadá o Australia. En abril, expertos mandatarios por la ONU, pero no hablan en su nombre, pidieron al papa Francisco que actúe y expresaron su “gran preocupación” por las numerosas acusaciones.

El pontífice argentino ha convertido la lucha contra las agresiones sexuales, conductas que hacen del clero un “instrumento de Satán”, en una de sus prioridades y público en 2020 un Manuel para gestionar denuncias en la Iglesia.

Con información de AFP, EFE y Reuters

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad