El directivo admitió que es necesario reducir la actual alta frecuencia de las dosis de refuerzo para evitar que las personas rechacen la vacunación.
Bancel dijo que, en el mejor de los casos, la vacuna combinada para el Covid-19 y la gripe estaría disponible para el otoño boreal de 2023, al menos en algunos países.
El responsable de una de las dos firmas que ha desarrollado vacunas contra el Covid-19 con la nueva tecnología del ARN mensajero (la otra es Pfizer-BioNTech) también subrayó que ya desde noviembre su compañía trabaja en una dosis especialmente dirigida a combatir contra la variante ómicron del coronavirus, ya dominante en el mundo.
"La vacuna se está terminando (...) debería estar en las próximas semanas. Esperamos tener datos en marzo para compartir con los reguladores para determinar los próximos pasos", indicó Bancel.
Al respecto, le principal asesor de Salud del gobierno de Estados Unidos, Anthony Fauci, indicó en el mismo foro que la actual situación en la que se plantean dosis de refuerzo cada vez que surge una nueva variante del coronavirus no es la óptima, y debe intentarse una vacuna universal que pueda servir contra cualquier evolución del SARS-CoV-2.
Muchos países ya están ofreciendo una tercera dosis de una vacuna contra el COVID-19 a sus ciudadanos, especialmente a las personas mayores y a las personas inmunodeprimidas, mientras que Israel ha comenzado a ofrecer una cuarta dosis.
A principios de enero, el director ejecutivo de Moderna dijo que es posible que las personas necesiten una cuarta inyección en el otoño boreal de 2022, ya que es probable que la eficacia de los refuerzos contra el COVID-19 disminuya en los próximos meses.
Sin embargo, los programas de refuerzo se han encontrado con el escepticismo de algunos expertos en enfermedades, incluido el regulador de medicamentos de la Unión Europea, que ha expresado dudas sobre la necesidad de una cuarta dosis.
Con información de EFE y Reuters