"Estamos trabajando de cerca con diversos países para analizar por qué este virus está viajando ahora con mayor frecuencia", subrayó Lewis, quien también consideró anómalo el alto número de casos registrados en áreas urbanas para una enfermedad que habitualmente se da en entornos rurales.
El experto Andy Seale, del departamento de enfermedades de transmisión sexual de la OMS, añadió que esta viruela del mono no es una de ellas, "ni tampoco una enfermedad ligada al colectivo gay, como algunos han afirmado en las redes sociales, porque cualquiera puede contraerla por contacto".
"Es una enfermedad que se contagia por contacto cercano, no necesariamente sexual", insistió el experto.
La jefa de la unidad técnica anticovid de la OMS, Maria Van Kerkhove, añadió que es probable que con el mayor rastreo de casos éstos aumenten en los próximos días, pero aseguró que la situación "se puede contener" y recordó que la mayoría de los pacientes no muestran síntomas graves.
En la sesión informativa se recordó que estos síntomas pueden incluir fiebre, inflamación de los nódulos linfáticos, dolores de cabeza, cansancio muscular y erupciones cutáneas en cara, manos, pies, ojos o genitales.
Ante la posibilidad de que el virus sea una variación del habitualmente detectado en África, donde se conocen casos desde al menos 40 años, Lewis afirmó que se trata de un virus de gran tamaño que en general "es estable y no tiende a tener mutaciones".
Los expertos recordaron que la vacuna contra la viruela convencional, una enfermedad de mayor gravedad y que durante siglos causó gran mortandad en el planeta, probó ser eficaz en un 85% contra la viruela del mono.
Viruela del mono: ¿cuáles son los síntomas y cómo se contagia?
Sin embargo, la mayoría de las generaciones más jóvenes no están vacunadas contra la viruela, que se consideró erradicada a nivel global hace ya cuatro décadas, por lo que se detuvieron sus campañas de inmunización.