"Liberar" Ucrania
Putin reafirmó que su objetivo era "liberar" la región industrial del Dombás, en el este de Ucrania, y que la mayoría de los habitantes de la región no querían volver bajo el "yugo" de Ucrania.
Antes del discurso de Putin, los dirigentes mundiales reunidos en las Naciones Unidas en Nueva York denunciaron la invasión rusa de Ucrania y los planes para que cuatro regiones ocupadas celebren referendos sobre la adhesión a Rusia en los próximos días.
En un movimiento aparentemente coordinado, autoridades prorrusas anunciaron referendos para el 23-27 de septiembre en las provincias de Luhansk, Donetsk, Jersón y Zaporiyia, que representan alrededor del 15% del territorio ucraniano, un área del tamaño de Hungría.
Rusia ya considera que Luhansk y Donetsk, que juntas forman la región del Dombás que Moscú ocupó parcialmente en 2014, son Estados independientes. Ucrania y Occidente consideran que todas las partes de Ucrania en poder de las fuerzas rusas están ocupadas ilegalmente.
Rusia tiene ahora cerca del 60% de Donetsk y había capturado casi toda Luhansk en julio, tras lentos avances durante meses de intensos combates.
Estos logros están ahora amenazados después que las fuerzas rusas fueran expulsadas de la vecina provincia de Járkov este mes, perdiendo el control de sus principales líneas de suministro para gran parte del frente de Donetsk y Luhansk.
"Los rusos pueden hacer lo que quieran. No cambiará nada", dijo el martes el ministro ucraniano de Asuntos Exteriores, Dmitro Kuleba, en respuesta a las preguntas de los periodistas en las Naciones Unidas, donde los mandatarios llegaban a una reunión de la Asamblea General dominada por la guerra en Ucrania.
En un tuit, añadió: "Ucrania tiene todo el derecho a liberar sus territorios y seguirá liberándolos diga lo que diga Rusia".
Si el plan del referéndum "no fuera tan trágico, sería divertido", dijo el presidente francés, Emmanuel Macron, a los periodistas antes de la asamblea de la ONU en Nueva York.
Putin ordenó el 24 de febrero una "operación militar especial" en Ucrania para erradicar a los nacionalistas peligrosos y "desnazificar" el país. La guerra ha dejado miles de muertos, ha destruido ciudades y ha hecho huir a millones de personas de sus hogares en la antigua república soviética.
El canciller alemán, Olaf Scholz, afirmó que Putin sólo renunciará a sus "ambiciones imperiales", que corren el riesgo de destruir Ucrania y Rusia, si reconoce que no puede ganar la guerra.
"Por eso no aceptaremos ninguna paz dictada por Rusia y por eso Ucrania debe ser capaz de rechazar el ataque de Rusia", dijo Scholz en su primer discurso ante la Asamblea General.
El primer ministro japonés, Fumio Kishida, dijo a la asamblea que la credibilidad de la ONU estaba en peligro debido a la invasión de Rusia, miembro permanente del Consejo de Seguridad y que era necesario reformar el consejo.
"La invasión rusa de Ucrania es una conducta que pisotea la filosofía y los principios de la carta de la ONU. (...) No debe tolerarse nunca", dijo Kishida.