Otras ideas propuestas incluyen un "tractor de gravedad" o una misión para hacer explotar el objeto con un arma nuclear.
Impacto cinético
Esta técnica es la que experimentó la NASA hace unas semanas. Consiste en chocar una nave contra un asteroide, con el fin de "empujarlo" ligeramente, y así desviar su trayectoria.
Esta primera prueba permitirá comprender cómo reacciona el asteroide y, por lo tanto, calcular mejor la fuerza necesaria en el futuro.
El tamaño de la nave utilizada dependerá del tamaño del asteroide que amenaza con chocar con la Tierra.
Si la amenaza de impacto de un asteroide contra la Tierra fuera real, habría que lanzar una misión con uno o dos años de anticipación para enfrentarse a un asteroide pequeño, o décadas antes del impacto proyectado para objetos de cientos de kilómetros de diámetro.
Un objeto más grande podría requerir el impacto de múltiples naves espaciales.
¡Misión cumplida! Así fue el impacto de la sonda DART contra un asteroide
Tractor de gravedad
Si la aproximación de un objeto se detecta años o décadas antes de que impacte contra la Tierra, se podría enviar una nave para volar a su lado durante el tiempo suficiente para desviar su trayectoria con una atracción gravitacional por parte de la nave, creando un "tractor de gravedad".
"La virtud" de este método es su "total buena comprensión", porque "sabemos cómo funciona la gravedad", dijo Tom Statler, científico del programa DART en una sesión informativa de noviembre.
Sin embargo, la masa de la nave espacial sería un factor limitante, y los tractores de gravedad serían menos efectivos para los asteroides de más de 500 metros de diámetro, que son precisamente los que representan una mayor amenaza.
En un artículo de 2017, ingenieros de la NASA propusieron una forma de superar este inconveniente: hacer que la nave espacial extraiga material del asteroide para mejorar su propia masa y, por lo tanto, la gravedad.
Pero ninguno de estos conceptos ha sido probado y se requerirían décadas para construirlo, probarlo y lanzarlo.