La Organización Mundial de la Salud (OMS) hizo un llamado este lunes a invertir más para combatir las enfermedades tropicales desatendidas, que afectan a más de 1,600 millones de personas, en su mayoría en los países menos desarrollados.
Las enfermedades tropicales desatendidas (NTD por sus siglas en inglés) - como el dengue, el chikungunya y la lepra - son frecuentes en zonas donde hay una escasez en el tratamiento de las aguas y en el acceso a la salud.