Esta vez, los guionistas exigen salarios más altos y una mayor participación en las ganancias de la distribución de contenido a demanda a través de internet. De su lado, los estudios y las plataformas, dicen que necesitan reducir costos debido a las presiones económicas.
Los guionistas dicen que les cuesta ganarse la vida con salarios estancados o devaluados debido a la inflación, mientras sus empleadores lucran y aumentan los salarios de sus ejecutivos.
Estiman que nunca hubo tantos guionistas trabajando por el salario mínimo fijado por los sindicatos, mientras las cadenas de televisión contratan a menos gente para escribir series cada vez más cortas.
Uno de los principales desacuerdos es sobre cómo se paga a los guionistas por las series difundidas por plataformas de reproducción, que en espacios como Netflix suelen permanecer visibles por años.
¿Cómo se fija el salario de los guionistas?
Desde hace décadas, los guionistas cobran "derechos residuales" por la reutilización de sus obras, un porcentaje de los ingresos de los estudios por la película o el programa, o una tarifa fija cada vez que se reproduce un episodio.
Pero con el streaming, los guionistas obtienen un pago anual fijo, incluso si su trabajo alcanza el éxito de programas como "Bridgerton" o "Stranger Things", con cientos de millones de espectadores.
Consecuencias de la huelga
De alargarse, la huelga podría atrasar la producción de series y películas. Los programas de entrevistas nocturnos de Jimmy Kimmel, Seth Myers y Stephen Colbert deben ser las primeras víctimas de esta primera paralización del sindicato en quince años.
"Lo que está en juego aquí es que la reproducción en directo ha cambiado todo", dijo Danny Strong, un guionista ganador del Emmy que se sumó a la protesta en Nueva York.