Para Raquel Saad, académica de la Universidad Iberoamericana, la única manera en la que las acusaciones legales puedan afectar seriamente las aspiraciones de Trump es si estas le impiden continuar en la campaña.
“La única situación que yo vería que lo puede perjudicar es que a él no le permitan ya seguir con su campaña, porque el crimen podría ser de tal magnitud que ningún individuo podría seguir en la campaña”, dijo la especialista en política estadounidense y en opinión pública.
Una fiscal de Georgia debe anunciar de aquí a septiembre el resultado de su investigación sobre las supuestas presiones que ejerció para intentar cambiar el resultado de las presidenciales de 2020.
La académica de la Ibero señala que este puede ser el problema más grave para Trump y el que lo puede separar de la presidencia, aunque también admite que será el proceso judicial más largo y puede concluir mucho después de las elecciones de 2024.
El juicio penal por el caso abierto en Nueva York se celebrará probablemente a principios de 2024, en plena campaña por las primarias republicanas, en las que Trump es el gran favorito.
Una oportunidad para recaudar fondos
Además de lo discursivo, Trump ha utilizado ya los procesos judiciales en su contra para recaudar fondos para su campaña.
Después de su inculpación en Nueva York, el exinquilino de la Casa Blanca dio un discurso en su residencia en Florida para insistir en su inocencia y para recaudar fondos de sus simpatizante.
Trump se jactó más tarde de haber recibido millones de dólares de sus seguidores. Muchos de ellos, convencidos de que el expresidente es víctima de un complot, le siguen dando su apoyo contra viento y marea.
Lo importante de la recaudación también es “mostrar que tienen el dinero. Mostrar que tienen el dinero hace que la gente vea, uy, es mucho el dinero que tienen. Quiere decir que hay mucha gente que los apoya”, dice Saad. “Ver esta cantidad de apoyo hace que la gente se quiera subir con lo que le llaman el carro ganador”, explicó.
Con información de AFP