La principal sede del grupo mercenario ruso Wagner, en San Petersburgo (noroeste), afirmó este lunes que funciona con "normalidad" tras la fallida rebelión liderada por su líder, Yevgueni Prigozhin, durante el fin de semana.
"A pesar de los acontecimientos que tuvieron lugar, el centro sigue funcionando con normalidad de acuerdo con la legislación de la Federación Rusa", declaró la principal oficina del grupo en un comunicado, en un momento de incertidumbre sobre el futuro de la organización.