"Se podría decir que el cambio climático está tirando los dados", añadió Wing. "Siguen siendo posibles escenarios muy diferentes para cada tormenta, pero la probabilidad de que se produzca una muy intensa es mayor".
El cambio climático también puede aumentar la cantidad de lluvia que arrastran los huracanes, según Andrew Kruczkiewicz, miembro del Instituto de Investigación sobre Clima y Sociedad de la Universidad de Columbia.
"Cuanto más caliente está la atmósfera, mayor es la capacidad de absorción de agua", lo que puede significar más precipitaciones, consideró el experto. Las personas que hayan huido tierra adentro para escapar de un huracán podrían seguir enfrentándose a condiciones extremas, añadió.
Las precipitaciones durante el huracán Ian en septiembre de 2022 aumentaron al menos 10% debido al cambio climático, según investigaciones recientes.
Temporadas de huracanes más largas
Además de la intensidad de las tormentas, la temporada en la que se producen parece ser cada vez más larga.
Según Mann, el periodo en que las temperaturas de la superficie oceánica favorecen la formación de tormentas tropicales está comenzando antes y termina más tarde. Este parece ser el caso tanto en el Atlántico como en el Golfo de Bengala, en Asia.
Numerosas investigaciones demuestran que el cambio climático hace que los huracanes sean más peligrosos, pero su efecto sobre su frecuencia está menos claro, y se necesitan más investigaciones para comprenderlo.