En esta nueva ofensiva, la fiscal Leonor Morales denunció anomalías en "las actas finales de cierre de escrutinio" porque no fueron aprobadas por el "pleno" del Tribunal Supremo Electoral (TSE) por lo que "son nulas" para consignar los resultados de las elecciones.
En rueda de prensa, Morales señaló que la investigación se hizo por la denuncia de "un ciudadano", pero no lo identificó ni mencionó responsables.
El jefe de la fiscalía contra la Impunidad, Rafael Curruchiche, anunció que el TSE debe analizar los resultados de la investigación y tomar "la decisión al respecto”.
Pero de inmediato, la presidenta del TSE, Blanca Alfaro, defendió la elección de Arévalo, un socialdemócrata de 65 años que ganó en segunda ronda presidencial en agosto pasado, tras los comicios generales de junio.
"Los resultados están validados, están oficializados y son inalterables (...)", los funcionarios electos "deben tomar posesión" en enero, "de lo contrario hay rompimiento del orden constitucional", afirmó.
La magistrada aseguró que la fiscalía no tiene "facultad" para hacer que el TSE anule unas elecciones, "salvo una sentencia" de la Corte de Constitucionalidad (máximo ente judicial)”.
Arévalo y sus seguidores acusan a la fiscal general Consuelo Porras de ser la artífice del "golpe de Estado" y han pedido su renuncia en manifestaciones en las calles. "Los golpistas intentan destruir el régimen democrático", insistió este viernes.
Recientemente, cuatro de los cinco magistrados del TSE huyeron del país después de haber sido despojados de su inmunidad en relación con el caso.
Las medidas contra Arévalo, su partido y el TSE han generado protestas en varias partes de Guatemala y una crisis política que se ha agudizado en los últimos meses.
"La fiscalía de Consuelo Porras dice que el país ha sido 'víctima de una estructura criminal'. Estoy de acuerdo, pero una estructura con ella a la cabeza para cambiar resultados electorales y negar la decisión que ya tomó el pueblo guatemalteco. ¡Ya basta!", escribió en X (antes Twitter) Juanita Goebertus, directora de la división de las Américas de Human Rights Watch.
Con información de AFP y Reuters