La protesta contra la formación Alternativa para Alemania (AfD) fue tan multitudinaria en Múnich, en el sur, que la marcha tuvo que ser interrumpida. La policía estimó que unas 100,000 personas acudieron a la marcha, la más numerosa hasta el momento. Otras estimaciones elevan la cifra a 200,000 personas.
También se registró una asistencia masiva en la explanada del Reichstag de Berlín, cifrada en 100,000 personas por la policía, según la radio RBB, y en 350.000 por los organizadores.
Algunos de los participantes llevaban pancartas con las frases "Fuera nazis" o "Nunca más, es el momento" escritas.
El partido, que entró en el Parlamento en 2017, es la segunda fuerza con más intención de voto a nivel nacional (alrededor del 22%) según las encuestas.
Cerca de 250,000 personas se habían manifestado ya el sábado en decenas de ciudades del país, según estimaciones de la cadena ARD.
La convocatoria del domingo llegó a unas cuarenta ciudades alemanas. En Colonia, los organizadores cifraron la multitud en 70,000 personas, mientras que en Bremen, la policía local contó 45.000 manifestantes en el centro.
Una reunión secreta
Las concentraciones se suceden desde que el medio de investigación Correctiv informara el 10 de enero de una reunión secreta en Potsdam, cerca de Berlín, donde se discutió un proyecto de expulsión masiva de inmigrantes, solicitantes de asilo y ciudadanos alemanes "no asimilados".
La ministra del Interior, Nancy Faeser, comparó la reunión a la "horrible conferencia de Wannsee", en 1942, en la cual el régimen nazi planificó el exterminio de los judíos europeos.
Entre los participantes se encontraba una figura del movimiento identitario radical, el austriaco Martin Sellner.
AfD confirmó la presencia de sus miembros en la cita, pero aseguró que no apoyaba el proyecto de "reemigración" presentado por Sellner.
Políticos, representantes religiosos y entrenadores de fútbol pidieron a la población que se movilice contra este partido, que, según las encuestas, es favorito para ganar las elecciones regionales en otoño en tres Estados federados del este.
Los manifestantes "nos infunden valor", declaró el domingo el presidente alemán Frank-Walter Steinmeier. "Defienden nuestra república y nuestra Constitución frente a sus enemigos".