Otras 15 personas sufrieron heridas graves, dijo el jefe del Departamento de Bomberos, Ross Grundyson, en una conferencia de prensa a última hora de la tarde del miércoles. Once de los heridos por los disparos o el caos resultante eran niños de tan solo 6 años, sostuvieron las autoridades.
El hospital Children's Mercy declaró que habían ingresado 12 heridos, entre ellos 11 niños de entre 6 y 15 años. Nueve de ellos fueron alcanzados por balas, pero todos deberían recuperarse de las heridas, detalló a la agencia AFP una vocera de ese establecimiento médico.
Ninguno de los miembros del equipo de la NFL, sus entrenadores u otro personal que asistió a la celebración resultó herido, dijeron los Chiefs.
El alcalde de Kansas City, Quinton Lucas, lamentó que las autoridades de la ciudad finalmente no pudieran prevenir tal violencia a pesar de la presencia de más de 800 agentes del orden, incluidos agentes federales, como parte de la seguridad del evento.
"Desfiles, mítines, escuelas, películas, parece que casi nada es seguro", dijo el demócrata Quinton a periodistas, relatando que el mismo estaba entre los que corrieron a refugiarse ante el sonido de los disparos.
Con información de AFP y Reuters