"Hemos mantenido una intensa actividad diplomática con aliados y socios, comunicando ese mensaje directamente a Irán. Hemos comunicado ese mensaje directamente a Israel", dijo Blinken.
Estados Unidos seguirá defendiendo a Israel contra los ataques, remarcó Blinken, pero señaló que todos en la región deben comprender los riesgos de una escalada y un error de cálculo.
"Más ataques sólo aumentan el riesgo de resultados peligrosos que nadie puede predecir y nadie puede controlar totalmente"
Blinken declaró también que las conversaciones para lograr un alto el fuego y un acuerdo sobre los rehenes en la guerra de Gaza habían llegado a su fase final y deberían terminar muy pronto.
Ismail Haniyeh, líder político del grupo islamista palestino Hamás, fue asesinado la semana pasada en Teherán, la capital iraní. El atentado suscitó amenazas de venganza de la república islámica contra Israel, que no ha reivindicado su autoría.
Junto con la muerte del alto mando militar del grupo libanés Hezbolá, Fuad Shukr, a manos de Israel en un ataque sobre Beirut la semana pasada, se ha intensificado la preocupación de que el conflicto de Gaza se esté convirtiendo en una guerra más amplia en Oriente Medio.
Irán ha dicho que Estados Unidos tiene responsabilidad en el asesinato de Haniyeh por su apoyo a Israel.