La vicepresidenta Kamala Harris y el expresidente Donald Trump protagonizaron la noche de este martes un debate donde por primera vez pudieron enfrentar sus puntos de vista sobre Estados Unidos ante los electores, en un momento en el que las encuestas los muestran cabeza a cabeza.
En un intercambio tenso, los candidatos a la presidencia de Estados Unidos mostraron sus enormes diferencias en temas clave como la economía, la migración y el aborto. Pero, ¿quién de los dos ganó el debate?
Gonzalo Soto, director editorial de Expansión, y Mariel Ibarra, editora de Expansión Política, conversan con Rodrigo Aguilar Benignos, analista y miembro del U.S. Council on Foreign Relations; Verónica Ortiz, abogada, analista política y exdirectora del Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales (Comexi), y José Andrés Suemano, especialista en políticas públicas para la seguridad del Colegio de la Frontera Norte, para analizar el primer encuentro entre la demócrata y el republicano.
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Donald Trump y Kamala Harris protagonizaron el que quizás fue su único debate, pues aunque han acordado tres debates, no se han pronunciado sobre fechas y organizadores de los siguientes encuentros previos.
Rodrigo Aguilar consideró que el debate fue parejo, aunque le da el gane a la vicepresidenta por lograr poner a Donald Trump a la defensiva y hacer que se metiera a temas en los que no se sentía cómodo, como el género y la raza.
"Puso de manifiesto su experiencia como fiscal ante Trump, lo puso contra las cuerdas", dijo Aguilar. Sin embargo, no cree que pueda mover las encuestas, ya que el debate fue bastante parejo.
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"Yo creo que después de este debate, muchos indecisos le van a dar una nueva mirada a Kamala Harris", dijo el analista, quien señaló que la vicepresidenta se mostró muy nerviosa en el primer segmento, pero mejoró su desempeñó en la segunda mitad.
Aguilar dijo que Trump insistirá en la narrativa de llamar a Harris "marxista" e "izquierdista radical", pues es un discurso muy efectivo para cierta parte del electorado estadounidense.
Aguilar dijo que Trump insistirá en la narrativa de llamar a Harris "marxista" e "izquierdista radical", pues es un discurso muy efectivo para cierta parte del electorado estadounidense.
Sobre la narrativa que le sirve a Harris, Aguilar señala que el lenguaje no verbal de la candidata demócrata fue muy bueno, para señalar los mensajes risibles de Donald Trump, como cuando aseguró que los migrantes indocumentados se comen a los gatos o los perros de los habitantes de algunos pueblos estadounidenses.
Durante varios momentos del debate, Donald Trump se enganchó con temas poco cómodos para él, como la identidad racial de su rival y el aborto.
"Las elecciones se ganan por las emociones. Harris fue muy convincente en usar el miedo, ¿el miedo a qué? A Charlestoville, recordó los (disturbios antisemitas) de Charlestoville, a los Proud Boys, a un ultraderechista", dijo Aguilar.
Aguilar dice que, sin embargo, los demócratas tienen que hacer mucho más para convencer a los indecisos de votar a favor de su candidata.
El miembro del U.S. Council on Foreign Relations dijo que Trump hizo bien en mantener su discurso, especialmente cuando volvió a acusar al gobierno de Joe Biden de usar al aparato de justicia en su contra, pues le sirve decir que es víctima de una "caza de brujas". En cambio, Harris pudo irse mucho más a la yugular contra su rival.
Trump ganó en el tema migratorio y en el económico, de acuerdo con Aguilar, pues el republicano logró posicionar el tema de la alta inflación durante el gobierno de Joe Biden, una de las principales quejas de los votantes sobre la administración demócrata.
Acerca del apoyo de la cantante estadounidense Taylor Swift a Kamala Harris, el analista dijo que puede beneficiarla, pero que debemos esperar a las encuestas.
Verónica Ortiz dijo que Kamala Harris se vio presidencial y logró colocarse entre las personas que quizás no la tenían tan en el radar, aunque tampoco piensa que el expresidente salió derrotado, pues le dio a sus seguidores lo que esperaban.
La expresidenta de Comexi dijo que a Harris le hizo falta que el debate tuviera un discurso de apertura, para fijar su posición. Sobre los mensajes de cierre, Ortiz dijo que Trump fue más contundente que su rival, sobre todo en temas como migración y economía, que son de mucha importancia para los electores.
José Andrés Suemano también dijo que Harris ganó el debate, pues confirmó que tiene la capacidad para debatir, aunque se puso nerviosa al inicio del debate.
"A Trump le paso lo contrario a lo que le suele suceder en los debates", dijo el especialista del Colegio de la Frontera Norte. "Ahora fue Kamala quien logró, con el tamaño de sus mítines, quien logró que Trump se enojará y se desencajara".
Suemano señaló que, aunque trató varias veces de llevar el tema a la mesa, Trump no logró posicionar el tema migratorio porque se distrajo en discusiones que Kamala Harris le tendió para desviar la atención.
"Sí tenemos un problema migratorio, si hay una gran cantidad de gente que está buscando llegar a los Estados Unidos, que también representa problema en el lado mexicano y en el lado estadounidense", dice Suemano, que recuerda que en la frontera norte hay temas de seguridad, como desapariciones forzadas, que también afectan a los migrantes.
El especialista señaló que Trump se distrajo y, en lugar de hablar de los problemas reales relacionados a la migración, se enganchó en narrativas extravagantes.
Sobre la relación con México, con Harris se puede esperar una relación respetuosa, pero mucho más dura de lo que ha sido el presidente Joe Biden. Trump, en cambio, usará los aranceles como moneda de cambio para pedir más militares mexicanos controlando la migración de Centroamérica.
"En el tema de seguridad las relaciones no están en el mejor momento", recordó el analista.
Trump seguirá empujando el tema migratorio a lo largo de su campaña para poder contrarrestar la "luna de miel " que Kamala Harris tiene con parte del electorado, así como la guerra comercial con China, que puede afectar a México.
"El tema de seguridad va a ser clave para la relación bilteral sin importar quien sea el presidente", aseguró. "Las agencias estadounidenses están perdiendo la paciencia" con el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Suemano señaló que la reforma judicial, que está a punto de ser aprobada en el congreso, puede crispar aún más la relación con Estados Unidos, sin importar quién gane la elección, "lo cual no es una buena noticia porque hablamos de nuestro principal socio comercial".
