La agencia se creó en 2003 como parte de la reestructuración del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) tras los ataques del 11 de septiembre de 2001, con el objetivo de reforzar el control migratorio. Actualmente, cuenta con más de 20,000 empleados distribuidos en 400 oficinas dentro y fuera de EU y un presupuesto anual de 9,000 millones, según el informe del año fiscal 2024 .
El director interino de ICE es Caleb Vitello, quien reporta a la secretaria del DHS, Kristi Noem.
La agencia se divide en cuatro áreas: Investigaciones de Seguridad Nacional, Operaciones de Cumplimiento y Deportación, la Oficina del Asesor Jurídico Principal y Gestión y Administración.
Las deportaciones disminuyen en el interior, pero no en la frontera
Las deportaciones por parte de ICE en el interior de Estados Unidos han disminuido en los últimos 15 años. Durante los años fiscales de 2009 a 2016, el promedio anual era de 155,000 deportaciones; en los años fiscales 2017-2020, la cifra cayó a 81,000 y en los últimos cuatro años el promedio anual fue de 38,000.
Por el contrario, las deportaciones tras un arresto fronterizo han aumentado considerablemente. En el año fiscal 2024, ICE deportó a 224,000 personas tras su detención en la frontera, en parte debido a un aumento en los recursos movilizados por el DHS. Estas deportaciones suelen ser más rápidas, sencillas y económicas, ya que no requieren operativos de localización dentro del territorio estadounidense.
¿Cómo decide la ICE a quién arrestar?
ICE localiza y detiene a migrantes en distintas circunstancias, pero la mayoría de las detenciones ocurren cuando los departamentos de policía locales transfieren a personas bajo su custodia. Sin embargo, también existen operativos dirigidos, como las "detenciones en masa" en lugares de trabajo o escuelas, aunque estos casos han sido poco frecuentes. El pico histórico se registró en el año fiscal 2008 con menos de 7,000 detenciones de este tipo.
Cuando una autoridad local arresta a una persona, sus huellas dactilares se verifican en bases de datos nacionales de seguridad e inmigración. Si se encuentra alguna coincidencia, la información es enviada a ICE para determinar si existen violaciones a la ley o órdenes de deportación. En caso afirmativo, ICE puede solicitar la detención del individuo hasta por 48 horas.