Su acción fue breve, ya que el personal de seguridad actuó rápidamente y lo detuvo en el campo de juego y la transmisión del evento no mostró la protesta y el show continuó sin interrupciones.
Un representante de la NFL comentó a la NBC que el manifestante formaba parte del elenco de 400 personas en escena, asegurando que "el individuo ocultó el objeto en su persona y lo reveló al final del espectáculo". También enfatizó que "nadie involucrado en la producción estaba al tanto de la intención del individuo".
De acuerdo con AP, Roc Nation, la compañía de entretenimiento responsable de la producción, se deslindó del acto, asegurando que "no estaba planeado ni formaba parte de la producción y nunca estuvo en ningún ensayo".
El portavoz de la NFL, Brian McCarthy, confirmó que "el individuo será vetado de por vida en todos los estadios y eventos de la NFL". Mientras tanto, el Departamento de Policía de Nueva Orleans informó que está evaluando los posibles cargos aplicables, aunque hasta el momento no se ha emitido una citación judicial.
El episodio ocurre en un contexto de creciente polarización en torno a los conflictos en Gaza y Sudán, y pocos días después de que Donald Trump propusiera la "toma de Gaza" por parte de Estados Unidos.