“Quiero precisar que es un desplazamiento que ya estaba previsto”, señaló el portavoz de la diplomacia iraní, Esmail Baghai, durante una conferencia de prensa en Teherán. Según dijo, la visita ocurrirá “a finales de semana” y tendrá como fin abordar “los últimos desarrollos en las negociaciones”.
La portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova, confirmó que “están previstas conversaciones con Serguéi Lavrov, así como reuniones con responsables rusos”.
Irán y Rusia mantienen una alianza estratégica, reforzada desde que Teherán se distanció del acuerdo nuclear tras la salida de Washington en 2018. El diálogo con Moscú es clave para coordinar posturas frente a las potencias occidentales, especialmente ahora que se reinicia la vía diplomática con Estados Unidos.
"Voy a solucionar este problema"
El sábado pasado, Irán y Estados Unidos retomaron el contacto gracias a la mediación del sultanato de Omán. Pese a no tener relaciones diplomáticas desde 1980, ambos países intercambiaron puntos de vista sobre el programa nuclear iraní.
El expresidente Donald Trump, quien en su primer mandato decidió retirar a EU del acuerdo firmado en 2015 por considerar que era “el peor acuerdo jamás negociado”, mantiene una postura dura hacia Teherán. Este lunes declaró desde la Casa Blanca: “Voy a solucionar este problema. Es bastante fácil”, en referencia al actual proceso de diálogo.
El acuerdo original, firmado en Viena entre Irán y seis potencias (China, Francia, Reino Unido, Rusia, Estados Unidos y Alemania), imponía límites estrictos al programa nuclear iraní a cambio del levantamiento de sanciones internacionales. El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) se encargaba de supervisar su cumplimiento.
Sin embargo, tras la retirada estadounidense en 2018, Irán aceleró su programa de enriquecimiento de uranio.