La Gen Z contra la corrupción y el nepotismo
Cuando Nepal prohibió la semana pasada las principales plataformas de redes sociales, incluida Facebook, alegando una oleada de noticias falsas, activistas como Sandip lo vieron como un intento de silenciar su creciente movimiento en línea contra la corrupción.
Se lanzaron a la acción y recurrieron a aplicaciones aún accesibles como Viber y TikTok para congregar a miles de personas, desencadenando protestas que se saldaron con al menos 19 muertos y que, en última instancia, obligaron al primer ministro K.P. Sharma Oli a abandonar su cargo el martes.
Sandip, un influencer de las redes sociales que utiliza un solo nombre, dijo que había hecho varios llamamientos en línea, algunos utilizando redes privadas virtuales para eludir la prohibición, pero que no había esperado que tanta gente saliera a las calles de Katmandú, la capital de Nepal, y otros lugares.
"Todos y cada uno de los ciudadanos de Nepal estaban hartos del gobierno corrupto de Nepal", afirmó el joven de 31 años, residente en el distrito de Lalitpur, cerca de la capital.
"La rabia contra este gobierno llevaba gestándose muchos meses, pero la convocatoria de esta protesta fue muy espontánea".
Transparencia Internacional sitúa a Nepal en el puesto 107 de 180 países en su Índice de Percepción de la Corrupción, destacando los persistentes problemas de gobernabilidad. Los activistas afirmaron que la frustración por la desigualdad y la falta de oportunidades laborales también influyeron.