OPINIÓN: Crecimiento en índice de competitividad en México, nada significativo
Nota del editor: Carlos Arocha es actuario y fundador de Arocha & Associates, una compañía de consultoría con sede en Zúrich. Es cofundador del Proyecto Swift Academy, secretario del consejo de liderazgo y desarrollo de la Sociedad de Actuarios (en Estados Unidos) y embajador de dicha organización en Suiza. Las opiniones en esta columna pertenecen exclusivamente al autor.
(Expansión) — El 15 de noviembre pasado, el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI) dio a conocer los resultados preliminares de su Índice Nacional de Competitividad (INC), que ha venido calculando desde hace unos años.
Este índice—elaborado en colaboración con la Secretaría de Economía—ofrece una medida de la capacidad para competir, sea con otros indicadores, sea con dos o más observaciones de la cifra en distintas fechas.
EL INC está compuesto por siete categorías:
- Desempeño macroeconómico
- Instituciones
- Capacidades
- Infraestructura
- Eficiencia de negocios
- Innovación
- Medio ambiente e inclusión social
Cada una de estas categorías está ponderada de manera equivalente: tiene el mismo peso la macroeconomía que las capacidades, o cualquiera otro rubro. A su vez, cada categoría se compone de dos o más elementos, y el número de variables analizadas supera una centena. No obstante, hay aspectos subjetivos: ¿cómo medir la innovación?, o ¿qué factores se deben tomar en cuenta para juzgar la eficiencia de los negocios?
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Sin embargo, hay aspectos útiles en la estadística. El INC sirve para medir el cambio relativo de las categorías, cuando su medición es consistente año con año.
Así, dice el INEGI que en el periodo 2010—2015 la competitividad se incrementó en 4.95%, lo que equivale a un crecimiento promedio de 0.97% anual compuesto. En otras palabras, prácticamente no hay crecimiento, aun cuando la gráfica del reporte del INEGI parece decirnos otra cosa.
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La categoría que más creció fue la de “eficiencia de negocios”, compuesta por las calificaciones de tres mercados, el de bienes, el financiero y el laboral. Por otra parte, la categoría menos positiva fue la de “instituciones”, integrada por las notas de seguridad pública y eficiencia del gobierno.
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Probablemente la nota agradable es que el índice creció en un robusto 1.9% de 2014 a 2015. Sin embargo, la reciente democión de México en el ranking global del Banco Mundial en el tema de facilidad para hacer negocios, puede oscurecer el panorama.
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Estaremos reportando las conclusiones del INEGI durante el primer trimestre de 2017, cuando el INC quede definitivamente determinado.
