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OPINIÓN: Las bases de Trump podrían llevarnos a una guerra nuclear

David Andelman escribe que aunque deshacer el tratado comercial entre Estados Unidos y Corea del Sur agrade a las bases de Donald Trump, no es una medida inteligente.
lun 04 septiembre 2017 09:59 AM
Armamento
Armamento El líder norcoreano Kim Jong Un proporciona orientación sobre un programa de armas nucleares en esta foto sin fecha publicada por la Agencia Central de Noticias de Corea del Norte. (Foto: KCNA/REUTERS)

Nota del editor: David A. Andelman colabora frecuentemente con CNN Opinion y escribe artículos para el diario estadounidense Usa Today. Escribió el libro A Shattered Peace: Versailles 1919 and the Price We Pay Today. Fue corresponsal extranjero del New York Times y corresponsal de CBS News en París. Síguelo en Twitter como @DavidAndelman . Las opiniones en esta columna pertenecen exclusivamente al autor.

(CNN) — No vale la pena cumplir todas las promesas de campaña. Pero para complacer a sus bases, parece que Donald Trump está a punto de deshacer el principal tratado comercial de Estados Unidos con Corea del Sur. Será el primer tratado bilateral que habrá cancelado como presidente. ¿Inteligente? No. No lo es ahora y, probablemente, nunca lo sea.

¿Acaso este no es el momento en el que deberíamos hacer todo lo que podamos por respaldar y fortalecer a Corea del Sur, país que es el principal baluarte ante un loco que presume que ya tiene una bomba de hidrógeno con la que puede destruir a la civilización? Aparentemente no si eso significa dejar de cumplir una promesa de campaña más.

Lee: ¿Qué es una bomba de hidrógeno y por qué la desea Norcorea?

Donald Trump hizo esa promesa cuando era candidato, cuando Corea del Norte estaba muy lejos de ser prioridad en su lista y cuando parecía que hacer otros compromisos era mejor idea.

Pero una a una, sus promesas han quedado en nada. No ha logrado " abrogar y reemplazar Obamacare ", " construir un muro y hacer que México lo pague ", deshacer el TLCAN ni " suspender total y completamente " la entrada de musulmanes a territorio estadounidense.

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Pero ahora, en el peor momento posible, parece que Trump está decidido a desatar una guerra comercial con uno de los aliados más esenciales de Estados Unidos, un país al que necesitamos apoyar desesperadamente porque se enfrenta al desafío existencial que representa su archienemigo del norte, que también amenazó con desatar un apocalipsis nuclear contra Estados Unidos.

Lee: Corea del Norte hace potente prueba nuclear

Ahora, Trump ha amenazado con cortar los lazos comerciales con cualquier país que haga negocios con Corea del Norte (lo que podría interrumpir el comercio de Estados Unidos con China). Según un reportaje que se publicó en el diario estadounidense The Washington Post , Trump instruyó a sus subalternos que se prepararan para retirar a Estados Unidos del tratado de libre comercio con Corea del Sur, a pesar de que acordó con el presidente Moon Jae-in que, "en principio", revisarían el tratado bilateral que regula los misiles balísticos de Corea del Sur.

Al menos tres de sus principales asesores en estas cuestiones se oponen a deshacer el tratado comercial. Se dice que tanto el asesor de seguridad nacional, el teniente general H. R. McMaster; el secretario de Defensa y general retirado de la infantería de Marina, James Mattis, y Gary Cohn, su principal consejero en economía y expresidente de Goldman Sachs, palidecen ante la idea de esta tragedia inminente provocada por Trump.

Pero eso tal vez no signifique mucho, ni siquiera luego de que Trump dijera, el domingo 3 de septiembre, que se reuniría con Mattis, con su jefe de gabinete, John Kelly, y con otros líderes militares, aparentemente para hablar de la amenaza de Corea del Norte.

nullParece que Trump también cree que el gobierno surcoreano necesita más agallas al tratar con Corea del Norte, o como tuiteó el domingo a las 7:46 de la mañana , "Corea del Sur se está dando cuenta, como les he dicho, de que sus intentos de apaciguar las cosas con Corea del Norte no servirán, ¡solo entienden una cosa!". Uno se pregunta exactamente cómo servirá debilitar la economía de Corea del Sur para darles más valor y confianza en sus tratos con Corea del Norte.

¿Recuerdan que a Trump le encantan los tratados comerciales bilaterales y odia los grandes pactos multinacionales, a los que considera perjudiciales para Estados Unidos y a los que culpa de la pérdida de empleos? Pues es cierto, Corea del Sur exporta más de 20,000 millones de dólares más en mercancías de lo que importa de Estados Unidos cada año.

Sin embargo, eso incluye un montón de televisores y smartphones Samsung y autos baratos; si ambos países aplicaran aranceles más altos, estos productos les costarían mucho más a los consumidores estadounidenses. Eso sin mencionar la producción de las granjas estadounidenses, cuyas exportaciones a Corea del Sur se han disparado (tan solo las exportaciones de carne han aumentado en más del doble en los pasados seis años).

También están los 23,000 millones de dólares en inversiones de Corea del Sur en Estados Unidos. ¿Cuántas inversiones quedarían en riesgo ahora? ¿Qué tan bien le va a caer esto a la clase media estadounidense?

Lee: Las postales que los estadounidenses extrañarán de Corea del Norte

También vale la pena recordar que el nuevo gobierno surcoreano apenas tiene cuatro meses. El presidente liberal Moon Jae-in llegó al poder luego de la detención y destitución de su predecesora por un escándalo de corrupción. Moon Jae-in dijo durante su campaña que era esencial llegar a una especie de acuerdo con Corea del Norte y se opuso a que las fuerzas estadounidenses desplegaran el THAAD (Sistema de Defensa Terminal de Área a Gran Altitud, por sus siglas en inglés) en Corea del Sur.

Sin embargo, tras las pruebas nucleares y de lanzamiento de misiles de Corea del Norte, pidió permiso a Estados Unidos para aumentar la capacidad balística de su propio país y aceptó, al menos temporalmente , el despliegue de una batería completa del THAAD en Corea del Sur. Este líder surcoreano, que acaba de aceptar un punto de vista más adecuado respecto a la forma de tratar a Corea del Norte, no tomará bien ningún intento de Estados Unidos por cortar las relaciones comerciales.

A causa de la salida de Estados Unidos del Acuerdo Transpacífico , China quedó al mando en gran parte de Asia; Corea del Sur sigue aferrada a la única vía hacia la prosperidad que le queda: el tratado comercial con Estados Unidos. Ahora, parece que Trump está decidido a arrancarlo de las manos extendidas de Corea del Sur, con lo que pondría fin definitivamente a lo que queda de las relaciones amistosas de Estados Unidos con Corea del Sur.

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Entonces ¿qué debería hacer Estados Unidos, en vez de sabotear este tratado comercial? El gobierno de Trump debería considerar una medida intermedia, como la que se está implementando en el caso del TLCAN.

Mantenemos vivo ese tratado y comenzamos negociaciones para "mejorarlo". Con eso, claramente se ganaría tiempo para todos. Tal vez hasta para pasar las elecciones parlamentarias de 2018, que podrían cambiar toda la dinámica en Washington. Con suerte, recuperaremos algo parecido a la realidad.

Consulta más información sobre este y otros temas en el canal Opinión

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