OPINIÓN: La lava no es lo único que hace estallar a un volcán
Nota del editor: Arianna Soldati es vulcanóloga y se doctoró en Geología por la Universidad de Missouri y la Universidad de Columbia. En sus investigaciones recurre a una combinación de técnicas de campo y de laboratorio para responder preguntas sobre el avance del flujo de lava. Síguela en Twitter como @AriannaSoldati . Las opiniones en esta columna pertenecen exclusivamente a la autora.
(CNN) — ¿Qué pasa cuando la lava se encuentra con el agua? Un podría estar tentado a pensar que la lava simplemente fluye y se enfría rápidamente mientras se solidifica. Pero es un poco más complicado… y a veces, más explosivo. Es verdad que el agua tiene muchas funciones en la actividad volcánica y la erupción del Kilauea, que nos ha paralizado desde hace semanas, lo demuestra muy claramente.
Primero que nada, el agua es lo que provoca las "fuentes de lava", la emisión sostenida de lava líquida a decenas de metros de altura que ha cautivado a tantas personas a través de las imágenes del Kilauea . Apenas el 1% del peso del magma (lava que no ha salido a la superficie) almacenado bajo el volcán, en su sistema de alimentación —la corteza terrestre—, se compone de agua.
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Conforme el magma sube hacia la superficie de la tierra, la presión a la que está sometida decrece, por lo que es imposible que continúe disuelta. Piensen en cuando abren una botella de refresco: al desenroscar la tapa, liberan la presión y de repente "aparecen" montones de burbujas (de dióxido de carbono, en este caso), o mejor dicho, se separan del líquido y se hacen visibles. En vulcanología, a eso lo llamamos "nucleación".
Una vez que se han nucleado, esas burbujas ligeras suben a la superficie cada vez más rápido; van creciendo cada vez más conforme la presión circundante decrece. Conforme las burbujas suben, arrastran consigo al magma. Cuando llegan a la superficie, se mueven tan rápido que salen disparadas del cráter hacia el cielo y forman una fuente de lava.
Las fuentes de lava alimentan los flujos de lava. Tras recorrer la zona del Rift Oriental del Kilauea , la lava se vuelve a encontrar con el agua al entrar al océano. Bajo el agua, la lava cambia de apariencia y forma almohadones de lava. Estos "almohadones de lava" —cúmulos esféricos de lava que se enfrían de afuera hacia adentro— se apilan y forman una pendiente submarina pronunciada llamada delta de lava. Como están compuestos de bloques sueltos de lava, apilados caóticamente, los deltas de lava son muy inestables y suelen derrumbarse repentinamente.
nullLa lava, que aún tiene una temperatura superior a los 1,000 grados centígrados , transforma el agua circundante en una nube de vapor blanco ascendente que suele ser ácido; a esto se le conoce como laze (mezcla de lava y haze, "niebla"). En su mayor parte, esta actividad es tóxica, pero no es violenta.
Sin embargo, el agua puede quedar atrapada entre los almohadones de lava y provocar explosiones violentas en la costa. El proceso se llama interacción combustible fundido-refrigerante (ICFR). La causa es el contacto repentino de un combustible fundido (la lava) con un líquido inestable frío (el agua).
Cuando la lava entra al océano se forma rápidamente una fina película de vapor entre la lava fundida y el agua, lo que los mantiene separados. Esta capa extradelgada de vapor es muy inestable y puede ceder en cuestión de segundos. Cuando eso pasa, el agua entra en contacto con la lava y provoca una reacción en cadena de intensidad creciente que provoca una gran explosión subacuática. Unas astillas de lava vidriosa salen disparadas en todas direcciones y cubren los alrededores con fragmentos translucidos y filosos de tierra nueva.
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Por otro lado, en la cumbre, el agua causa erupciones freáticas dentro del cráter Halemaumau. Las erupciones freáticas ocurren cuando el agua se evapora al instante. El agua subterránea, que se sitúa a poco más de 50 metros sobre el nivel del mar , se queda atrapada dentro del cráter y se calienta al punto de evaporarse rápidamente, lo que provoca explosiones violentas que transforman en cenizas algunas de las paredes del cráter. En una erupción freática, el magma no tiene nada que ver.
Estos días, todo el mundo está atento a la lava, incluso yo; pero cuando veas las explosiones en los cráteres, las fuentes de lava y los flujos al océano, no olvides que la fuerza detrás de todo esto, en una forma u otra, es el agua.
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