OPINIÓN: El NYT exhibe a Trump como el fraude que es

Nota del editor: Michael D'Antonio es autor del libro Nunca lo suficiente: Donald Trump y la búsqueda del éxito. Las opiniones expresadas en esta columna son exclusivas del autor.

CNN - ¿Recuerdas cómo el entonces candidato Donald Trump hablaba sobre cómo el "sistema estaba manipulado"? Él realmente sabía de lo que estaba hablando.

Con gran detalle y precisión, The New York Times confirmó que durante gran parte de su vida, Trump se benefició de un sistema manipulado, el cual su familia aprovechó para transferirle una enorme riqueza perteneciente a su padre.

Esta verdad, sospechada durante mucho tiempo por aquellos que han echado un vistazo a las finanzas de Trump, incluía prácticas cuestionables y potencialmente fraudulentas que se utilizaron para que el clan Trump pudiera evitar pagar los impuestos que la gente normal paga todos los días.

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El abogado de Trump niega con vehemencia las acusaciones contra su cliente y le dice al Times que son "100% falsas y altamente difamatorias".

Y, sin embargo, la historia del Times es bastante persuasiva. Según el diario, a la edad de 3 años, Trump recibía 200,000 dólares por año por parte de su padre. A los 8 años, ya era un millonario y su riqueza solo se dedicó a crecer a partir de entonces.

Hablemos de manipulación

En la década de 1960, su padre, Fred, era uno de los hombres más ricos de Nueva York. Su destreza financiera respaldó el primer gran proyecto de su hijo: la remodelación de un hotel en la terminal Grand Central y su distintiva Torre Trump en la Quinta Avenida.

Aunque la historia de fondo sobre el proyecto del hotel y la Torre Trump estaban bien establecidas, los hechos reunidos por el Times muestran que Donald Trump utilizó el fraude, no solo para llevar a cabo esos proyectos, sino a lo largo de su carrera.

The Times señala que se benefició de la generosidad de su padre por una suma de más de 400 millones de dólares. Gran parte de este dinero se le dio a través de entidades comerciales, fideicomisos y programas de empleo que le permitieron aceptar múltiples salarios al mismo tiempo.

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Esta manipulación incluyó esquemas que convirtieron a Trump en el empleado, el propietario, el administrador de la propiedad y el prestamista de su padre. Un ejemplo, según el Times, fue el desarrollo de los apartamentos de Beach Haven por Fred Trump. Después de construir el extenso complejo con préstamos federales, convirtió a sus hijos en propietarios, creando un flujo de ingresos que creció durante décadas.

Pero Beach Haven fue solo uno de los muchos planes que diseñó Fred Trump, y su hijo fue cómplice. En un pasaje clave del informe del Times, los autores explican que Fred y su esposa, Mary, pagaron un poco más de 52 millones de dólares en impuestos sobre pagos de 1,000 millones a sus hijos. Sin embargo, según la ley, deberían haber pagado un impuesto del 55% sobre las propiedades, lo que una cifra de 52 millones de dólares ni siquiera se acerca.

La evidencia que el Times exploró mientras se reunía esta radiografía financiera incluía más de 100,000 páginas de documentos. Los datos recogidos en estos documentos, algunos de los cuales provienen de las declaraciones de impuestos, muestran cómo casi 300 flujos de ingresos, incluidos los recibos de lavandería, se canalizaron al hombre que eventualmente se convertiría en presidente.

Toda la evidencia reunida por el Times entra en conflicto directamente con el mensaje que Trump ha promovido durante mucho tiempo. Desde sus primeros días en Manhattan, cuando se promocionó como un joven magnate, Trump insistió en que había tenido éxito gracias a su ingenio, creatividad y valor.

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Este mito es el principal hallazgo de su famoso libro The Art of the Deal, y fue el telón de fondo para el desarrollo de su programa de televisión El aprendiz. En dicho programa declaró falsamente que era "el mayor desarrollador de bienes raíces en Nueva York, por mucho". Los conocedores de bienes raíces, por supuesto, sabían que esta afirmación era mentira.

No es sorprendente que gran parte de la retórica de Trump fuera vista como una exageración al servicio de su imagen. Sin embargo, una vez que su visión para los negocios se convirtió en uno de los pilares de su campaña presidencial, se convirtió en presa fácil para una revisión de sus ingresos, pero Trump ha impedido el proceso al negarse a respetar la tradición de liberar sus declaraciones de impuestos. Pero, con el impresionante trabajo y cálculo, el Times ha hecho la imagen mucho menos opaca.

Los expertos en impuestos dijeron al diario que si bien algunos de los arreglos realizados por Trump y su familia eran legales, tienen dudas sobre otros aspectos de su estrategia. Los aspectos arriesgados de toda esta maniobra podrían explicar el porqué Trump trabajó tan duro para mantener en secreto los detalles de su vida empresarial.

La barrera de la discreción ha sido violada y lo que hay detrás parece ser una prueba de que, al menos, la reputación de la que Trump se jactaba fue un fraude desde el principio.

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