Publicidad

Síguenos en nuestras redes sociales:

Publicidad

El caso económico para la acción climática en las ciudades mexicanas

El mundo encara una emergencia climática, forzándonos a repensar maneras de usar recursos, crear empleos y mejorar la calidad de vida, opinan Jake Wellman, Leah Lazer y James Patterson-Waterston.
lun 21 octubre 2019 11:50 AM
Ciudades contra el cambio climático
El gobierno de AMLO trabaja en darle mayores dientes al SAT para que sea más eficiente en sus trabajos de fiscalización.

(Expansión) – En estos momentos críticos, las ciudades ofrecen una de las oportunidades más grandes. Con la mayor parte de la población mundial, la actividad económica y las emisiones de carbono concentradas en las ciudades, cada vez es más claro que el destino de las ciudades es el destino del planeta.

Esto es especialmente cierto en México, donde la población urbana se ha duplicado en los últimos 30 años. Un nuevo reporte de la Coalición para la Transformación Urbana, Emergencia Climática, Oportunidad Urbana , que se presentará oficialmente en México durante el Foro para la Transformación Urbana el próximo 22 y 23 de octubre, halló que los centros urbanos mexicanos se han expandido en más de 1,800 km2 desde el 2000, y que más de 4.4 millones de mexicanos viven en áreas urbanas o cuasi-urbanas a menos de 10 metros sobre el nivel del mar, haciéndolos vulnerables a inundaciones y al aumento del nivel del mar.

Publicidad

Al promover ciudades bajas en carbono, México puede reducir las emisiones mientras ofrece mejores estándares de vida y mejora las oportunidades para todos. Emergencia Climática, Oportunidad Urbana encuentra que la acción climática ambiciosa en las ciudades mexicanas requiere de 1 billón de dólares en inversiones para el 2050, lo que podría apoyar la creación de medio millón de empleos para el 2030 y 250,000 adicionales para el 2050. Para el 2050, los beneficios totales de estas inversiones excederían sus costos por cerca de 240,000 millones de dólares.

Sin embargo, los beneficios reales serían aún mayores, pues este estimado no incluye los muchos beneficios sociales de las ciudades neutras en carbono, como la mejora en la calidad del aire, traslados más cortos y temperaturas más bajas. En los lugares como la Ciudad de México, donde los residentes sufren de enfermedades por la contaminación atmosférica, estas inversiones en sustentabilidad mejorarían la salud – especialmente para poblaciones vulnerables como niños, adultos mayores, y aquellas comunidades de ingresos bajos que tienden a vivir en vecindarios más contaminados.

Movilizar este nivel de inversión y lograr estos beneficios requerirá de un compromiso nacional hacia la neutralidad de carbono en las ciudades mexicanas. Emergencia Climática, Oportunidad Urbana subraya cómo estas inversiones también generarían beneficios para todo el país, incluyendo empleos, crecimiento e infraestructura que reforzará el desarrollo continuo de una economía dinámica y con visión global y ayudará a hacer de las ciudades más atractivas, sanas y con mayores oportunidades.

Tal inversión provee de una oportunidad para que los gobiernos Federal y Estatales implementen la ambiciosa Ley de Cambio Climático 2018. Esta ley identifica a las autoridades municipales como críticas en el desarrollo e implementación de los programas de mitigación urbana y adaptación.

Publicidad

La acción climática urbana no es sólo una estrategia para alcanzar los compromisos climáticos del Acuerdo de París. Desarrollar ciudades neutras en carbono ayudará a que México alcance los Objetivos de Desarrollo Sostenible, incluyendo el desarrollar ciudades más sustentables (ODS 11), energía limpia (ODS 7), mejorar el manejo de residuos (ODS 12) y los sistemas de transporte (ODS 9), y apoyar empleo de calidad (ODS 8). Beneficios adicionales de una transformación urbana incluyen mejores resultados de salud (ODS 3) y una mejora en la acción climática (ODS 13).

Por otro lado, los costos de la inacción son cada vez más claros. Las ciudades del mundo cambiarán dramáticamente en las siguientes décadas. Para el 2050, la población urbana de África y Asia se espera crezca por 2.5 mil millones de personas – y en México, se espera crezca otro 50% a casi 150 millones. No lograr una transformación hacia la neutralidad de carbono en este momento crítico pondrá en peligro la salud ecológica que es la base de toda la prosperidad, y pondrá en peligro los empleos, viviendas y vidas de muchos. Sin embargo, los gobiernos locales no pueden lograr esta transformación solos. Los gobiernos nacionales tienen papeles que jugar, incluyendo la habilidad única de fondear y financiar la infraestructura urbana sostenible.

No hay tiempo que perder, y con más investigaciones mostrando los beneficios de la acción y los costos de la inacción, no hay excusas para no actuar.

Nota del editor: Jake Wellman y James Patterson-Waterston colaboran con Vivid Economics; Leah Lazer para Coalición para la Transformación Urbana. Las opiniones expresadas en esta columna pertenecen exclusivamente a los autores.

Consulta más información sobre este y otros temas en el canal Opinión

Publicidad

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad