(Expansión) – Hace unos días diversos medios debatieron con motivo de una publicación de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), titulado: “Bajo presión: la estrujada clase media”. La organización propone una segmentación de las familias en tres clases sociales, basadas en el ingreso y en el número de habitantes y dependientes por hogar, lo cual me parece concreto.
De tal forma que, en México una persona que vive sola e ingresa menos de 3,780 pesos mensuales, pertenece a la clase baja; si la persona percibe entre 5,040 pesos y 10,081 pesos mensuales, entonces, está en la clase media. Para pertenecer a la clase alta la persona requiere ingresar más de 10,081 pesos mensuales.