(Expansión) – En la semana, el Inegi publicó la segunda edición de la Encuesta Telefónica de Ocupación y Empleo (ETOE), que incluye información sobre el mercado laboral mexicano. En mayo -el segundo mes en mostrar el impacto total de la pandemia de COVID-19 y las medidas de contención sobre la economía de México-, la población ocupada (que tiene un trabajo o un vínculo laboral) incrementó en alrededor de 300,000 personas respecto a abril, y la tasa de desocupación disminuyó, de 4.7% en abril a 4.2% en mayo.
Sin embargo, el incremento en la población ocupada se debió en su totalidad a un incremento en el empleo informal: mientras que la cantidad de personas con empleo informal aumentó en 1.9 millones de personas, la población con trabajo formal disminuyó en 1.6 millones. Además, la tasa de subocupación – que agrupa a la población que trabaja pero quiere y necesita laborar más horas – incrementó respecto en 4.5 puntos porcentuales respecto a abril; en mayo casi un tercio de la población ocupada (29.9%) reportó la necesidad de trabajar más horas para incrementar su ingreso.