Publicidad
Publicidad

El liderazgo en tiempos de confinamiento

Nuestros líderes deberán contar con planes de acompañamiento basados en una comunicación para lograr comprender lo que está pasando y cómo esta el equipo de trabajo, apunta María Eugenia Martínez.
mié 16 diciembre 2020 12:00 AM

(Expansión) – Han cambiado las formas de trabajo, ha cambiado lo que hacemos y por qué lo hacemos, ya que se han adaptado lugares públicos diversos al ser hospitales temporales o refugios. Quizá ha cambiado la manera de relacionarnos con nuestra empresa porque se han tenido que aplicar medidas fuertes de ahorro que involucran disminución de sueldo de manera temporal, reestructuras o pérdidas de fuentes de empleo, congelamiento de vacantes, entre otras. Las cosas nunca serán como antes.

En este contexto de incertidumbre nos enfrentamos a retos que cuestionan lo que decimos que somos. Nuestro reto es mantener la motivación del talento que integran nuestros equipos de trabajo, recuperar y conservar el orgullo de pertenencia a la empresa después de este proceso doloroso durante este confinamiento o home office.

Publicidad

Hoy más que nunca, los mandos intermedios juegan un papel fundamental y son el principal contacto con la compañía en todos los niveles dentro de la organización. El liderazgo de nuestros gerentes o mánagers es clave para alcanzar los resultados de la organización, mantener al equipo motivado y enfocados en el negocio.

Nuestros líderes deberán contar con planes de acompañamiento basados en una comunicación para lograr comprender lo que está pasando y cómo esta el equipo de trabajo; construir relatos motivadores dentro de un eficiente modelo de comunicación y motivación interna, y compartir a través de nuevos canales ágiles y adecuados para nuestros equipo de trabajo acorde con sus especialidades y la generación de la que forman parte.

Esta comunicación deberá ser cercana, sincera, constante, proactiva, coherente y bidireccional. Que sea construida desde la empatía, que exista un reconocimiento al desempeño y que sea concreta, con una retroalimentación constante a través de una escucha permanente de nuestros equipos de trabajo.

Hacer un seguimiento personalizado

Se ha reducido el contacto directo con las personas de los equipos de trabajo. Es importante, que, sin embargo, la comunicación no decaiga. Es recomendable que, una vez a la semana, revisen juntos el estado de los proyectos, con esto disminuyes el estrés y logras organizar las tareas.

Además, es muy importante que te comuniques de forma individual con cada miembro del equipo para que no queden diluidas sus necesidades o comentarios y que puedas conocer personalmente a cada miembro de tu equipo.

Ser flexible

El inicio y el fin de la jornada ya no comienzan cuando llegas a la oficina o cuando te vas a casa y cada uno vive una realidad muy distinta: el cuidado de los mayores o de los niños o familiares en casa, la convivencia en pareja, con los compañeros de departamento, etc. Organiza al equipo para que cada uno, con sus circunstancias personales, pueda sacar adelante el trabajo.

Flexibilidad no significa conexión o disponibilidad indefinida, marca unos plazos y límites para que el equipo pueda desconectar y descansar.

Publicidad

Ser empático y paciente

La empatía es siempre clave para conectar, pero quizá ahora más que nunca es momento de pensar en lo que puede estar sintiendo nuestro equipo. Hay que comprender que en una crisis de gran escala la supervivencia se hace presente. Que tu equipo sepa que estás ahí para escucharlos y ayudarles en la medida de lo posible. Preguntar por las familias, su estado de ánimo o cómo llevan la semana, son detalles que en estos momentos tienen mucho valor y que te ayudarán a estrechar lazos con tu equipo.

Reconocer el trabajo bien hecho

Poner en valor el esfuerzo y profesionalidad de nuestros colaboradores hará que desempeñen mejor y con mayor entusiasmo su labor. El agradecimiento debe formar parte de tu agenda en estos tiempos.

Ayudar a tu equipo a desconectarse

Trabajando desde casa, corremos el riesgo de estar permanentemente conectados. Es importante fomentar la conciliación entre la vida personal y profesional y en este contexto del home office es necesario establecer pautas de trabajo remoto y conectividad, que nos ayuden a desarrollar nuestras funciones de una manera saludable y efectiva, mejorando el balance vida- trabajo.

Planificar la convocatoria y asistencia de trabajo

Agenda las reuniones, no llames de improviso ni esperes respuestas inmediatas. Evita el uso excesivo de herramientas de mensajes de textos. Nos sacan de la tarea que estamos haciendo y dificultan enormemente la concentración. Utiliza el correo electrónico para que tu interlocutor pueda organizar la lectura y respuesta de los mensajes. Es importante dejar claro, los tiempos de entrega y fechas limites para los diferentes proyectos. Y priorizar es fundamental, la diferencia entre lo que es importante y urgente.

Estoy convencida de que los momentos complicados son la mejor oportunidad para mostrar nuestra forma de hacer mejor las cosas.

Nota del editor: María Eugenia Martínez es Directora Senior de Talento para la Región Norte en LLYC. Síguela en LinkedIn . Las opiniones publicadas en esta columna pertenecen exclusivamente a la autora.

Consulta más información sobre este y otros temas en el canal Opinión

Publicidad

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad