Por otro lado, existen diversos patrones en la distribución de las variantes en estados y regiones del país. Así, Gamma presenta una mayor prevalencia en la región sur (Campeche, Quintana Roo, Yucatán). Alpha en el norte (Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas). Delta en el noroeste y centro sur (Durango, Chihuahua, Sonora, Sinaloa, Baja California Sur y Norte, CDMX, Estado de México, Hidalgo, Morelos, Puebla y Tlaxcala).
Todos los lunes se reúnen los integrantes que conforman el CoViGenMex (IMSS, Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias, Laboratorio Nacional de Genómica para la Biodiversidad del CINVESTAV, el Instituto de Biotecnología de la UNAM y el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo) y junto con especialistas en informática, estadística, epidemiología, virología y evolución, analizan las variantes del virus SARS-CoV-2 que pudieran tener un comportamiento biológico de interés para la salud pública.
Los reportes del CoViGenMex son enviados al Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (InDRE), que es el responsable de detectar los casos, seguir su comportamiento y contención a través del aislamiento de quienes hayan estado en contacto con la persona contagiada.
Pero, es imposible realizar el análisis en tiempo real, pues este suele tener un retraso de dos semanas, dada la dificultad de tener las muestras en estudio.
Así, en el reporte más reciente del CoViGenMex no se cita la llegada de la mutación de Delta. Pero es inevitable.
El CoViGenMex ya tiene detectada la presencia de Delta Plus. Un caso, al menos. Algunos de sus integrantes sostienen que hay más, pero desafortunadamente no es posible saberlo debido a la detección tardía producto de la dificultad para disponer en tiempo de las muestras en estudio. No hay manera de seguir y contener las variantes masivamente. En este periodo, muy probablemente, ya ocurrió la transmisión.