En especial en una crisis global, como la provocada por la emergencia sanitaria por COVID-19, la supervivencia de los negocios no podría ser posible sin anteponer las necesidades de nuestro equipo de trabajo, quienes experimentaron una transformación de manera abrupta y tuvieron que migrar su vida a lo digital.
Es así que las personas encargadas de la gestión del talento humano, sea el área de Recursos Humanos (RRHH) de empresas medianas o grandes o los mismos directores que asumen este rol en las pymes, tienen una enorme responsabilidad y mucho trabajo por realizar: cuidar a sus colaboradores, asegurarse de que estén capacitados en las nuevas destrezas digitales, además de responder en tiempo y forma a las normas y regulaciones del gobierno federal.
En lo que se refiere al cuidado de los trabajadores, en las empresas se han tenido que implementar protocolos para cuidar su salud física, pero además muchas organizaciones han diseñado programas para su bienestar integral, incluyendo su salud mental. Sin embargo, no olvidemos que debemos trabajar día con día en mejorar la experiencia de nuestros colaboradores, que ya es digital.
Además, es importante comprender que la digitalización va más allá del manejo de equipos, programas y plataformas, la transformación tiene que ver con lo que hacemos con la tecnología, cómo nos comunicamos y relacionamos con los demás a través de su uso.
No podemos asumir que nuestra gente ha aprendido sobre la marcha y no necesita ayuda, por lo que la capacitación continua en nuevas competencias debe ser parte de las estrategias de RRHH para hacer que la experiencia digital de los colaboradores sea fructífera.
También vemos que el gobierno federal busca proteger a los trabajadores, por ello instituyó la NOM-035 en 2018, la cual tiene el objetivo de identificar, analizar y prevenir los factores de riesgo psicosocial en el trabajo, así como promover un entorno favorable. Las áreas de RRHH están haciendo un gran esfuerzo por cumplir esta norma en la etapa en que se encuentra actualmente, lo cual ha sido complejo para los trabajos presenciales e implica retos mayores para los puestos remotos.
Aunado al cumplimiento de esta norma, los líderes de las organizaciones trabajan arduamente en comprender y aplicar las regulaciones de los últimos meses: la reforma al Artículo 311 de la Ley Federal del Trabajo en materia de teletrabajo y la reforma a la subcontratación, que recién entró en vigor el 1 de septiembre.