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Hábitos, la mínima expresión del éxito

Esas pequeñas (insignificantes si me permites el término), pero determinantes acciones a las que llamamos hábitos, son las que poco a poco y paso a paso construyen nuestro destino. Nos guste o no.
lun 06 marzo 2023 05:00 AM
Hábitos, la mínima expresión del éxito
Todos tenemos la responsabilidad de desarrollar buenos hábitos y eliminar aquellos que no nos benefician y, por el contrario, nos afectan (...) Engañar a la mente, ahí está el truco, considera Ana Michelle Concepción Esterrich.

(Expansión) - Algo que es tan fácil de hacer también es sencillo de no hacer. Sí, sé que estás pensando que esto no es lógica avanzada (y no, no lo es). De lo que vengo a hablarte es de las pequeñas tareas que pueden marcar la diferencia entre tener un buen o un mal día; una salud envidiable o perpetuar las enfermedades, tener una vida de éxito o condenarnos al fracaso.

Y esas pequeñas (insignificantes si me permites el término), pero determinantes acciones a las que llamamos hábitos, son las que poco a poco y paso a paso construyen nuestro destino. Nos guste o no.

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Un teórico nos diría que los hábitos son conductas que adoptamos en ‘x’ momento de nuestra vida y comenzamos a repetir regularmente. De repente y sin darnos cuenta, esas acciones ya forman parte de nuestra rutina desde hace años, tanto para llevarnos a ganar o para arrastrarnos a la ruina: derrochar la quincena en una sentada, hacer deporte todos los días, fumar hasta cansarnos, leer un libro por semana. Correcto. El ying y el yang.

Creo que, con el paso del tiempo se ha hecho habitual (incluso de moda) la propagación de malos hábitos, por una sencilla razón: venden. Beber alcohol vende (y mata). Fumar vende (y también mata). El sedentarismo vende (y mata tu productividad); mientras estás tranquila o tranquilo, en cama, viendo videos en el celular o series en tu plataforma favorita, ellos ya ganaron, y sí, tú perdiste.

Es una gran oportunidad para hablarnos con franqueza; todos tenemos malos hábitos, ¡uno!, por pequeño que sea, y claro, también buenos hábitos (uno, por pequeño que sea). Ojo, no es una invitación a la disculpa por mantener conductas nocivas ‘al fin y al cabo todos lo hacen’. Esta es solamente mi opinión, y mi opinión es que, todos tenemos la responsabilidad de desarrollar buenos hábitos y eliminar aquellos que no nos benefician y, por el contrario, nos afectan.

Hasta este punto hemos hablado de varias palabras que, como humanos, nos generan aversión: hábitos, conductas, y la más fuerte de todas, responsabilidad. Te tengo otra que tampoco te va a gustar: disciplina. ¿No será que, inconscientemente repelemos en automático la posibilidad de generar buenos hábitos, por la presencia de estas palabras? Y no es que generen incomodidad porque seamos buenos o malos, sino porque el ser humano está diseñado para sobrevivir, no para salir de su zona de confort.

Desde mi punto de vista, es imprescindible familiarizarnos con estos términos, si es que buscamos abandonar los vicios que están perjudicando nuestro trabajo, nuestra salud, nuestras finanzas, nuestra vida en familia o relación con amigos. Y adoptar esas palabras incómodas es indispensable para generar nuevos hábitos que nos lleven a ganar.

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¿Cómo? ¡Muy sencillo! ¡Decídelo! Decide dejar de apostar, y, por el contrario, ¡invierte! Engañar a la mente, ahí está el truco. Tu mente detectará que sigues en un juego en el que ingresas dinero y puedes ganar, aunque este ahora estará más seguro.

A partir de mi experiencia, erradicar de raíz un mal hábito, así porque sí, es una tarea que puede convertirse en un verdadero calvario. Entonces, ¿cómo hacerlo? ¡sustituye! Sustituye levantarte tarde por dormir temprano. Sustituye las series por audiolibros, los videos de gatitos por los de desarrollo personal, el chocolate por cacao puro, el cigarrillo por una paleta dulce (claro, bájale a la cantidad, no quiero que te acerques a la diabetes).

Todo esto con un objetivo claro, bien planteado, con fecha de caducidad y el ‘por qué’ queremos hacerlo. Cada pequeño paso, cada semana aplicando ese hábito, nos motiva a ir por el siguiente nivel. Sin temor a equivocarme, algo que siempre nos da satisfacción, nunca falla.

Nota del editor: Ana Michelle Concepción Esterrich (Instagram @anamichellehealthcoach) fue VPGM de Enterprise Business Solutions de AT&T México. Es instructora de yoga, health coach, experta en holistic health y wellness. Las opiniones publicadas en esta columna corresponden exclusivamente a la autora.

Consulta más información sobre este y otros temas en el canal Opinión

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