A primera vista y en papel puede parecer una herramienta maravillosa para ser más productivo y sí, suena muy bien poder estar en una junta mientras actualizamos una base de datos y agendamos la siguiente reunión con un cliente. Incluso para cosas personales es fascinantemente utópico.
La idea del multitasking entonces se ha posicionado como una muy popular cuando de productividad se habla, ya que, si puedes hacer muchas cosas al mismo tiempo, lo estás optimizando al máximo, ¿no? La respuesta es un no rotundo.
Cuando intentamos hacer varias cosas a la vez, lo más probable es que cometamos más errores. Científicos del French National Institute for Health and Medical Research (Inserm) llegaron a la conclusión de que dos tareas simultáneas reducen considerablemente el nivel de eficiencia y atención que el cerebro destina a cada labor, por eso hay combinaciones hasta peligrosas como hablar por teléfono y manejar.
Imagina que eres un chef que está cocinando en varias hornillas al mismo tiempo: intentas evitar que se queme el arroz mientras fríes un pescado, a la vez que sazonas la ensalada. El resultado es obvio y no, no es una cena perfecta.
- ¿Arroz?
- Sobrecocido
- ¿El pescado?
- Ya se quemó
Trabajo inteligente
En el trabajo sucede exactamente lo mismo: el que más hace, es mucho más propenso a equivocarse. Entonces, ¿por qué seguimos romantizando la idea de que hacer más es igual a ser más productivo? Porque en algunas organizaciones la falta de cultura, objetivos y liderazgos efectivos nos lleva a priorizar el trabajo duro, antes que el trabajo inteligente. Y porque honestamente muchas organizaciones han decidido que tienen que hacer más con menos: alcanzar más objetivos con menos gente.
Al hablar de líderes el daño es aún mayor y la importancia de la desmitificación del multitasking cobra mayor relevancia. El líder multitareas es quien está en todo y en nada y a pesar de que hace y hace, los resultados no son buenos para la compañía ni para el equipo.
Si abarcas mucho pero no resuelves nada, ¿eres líder? Si menor productividad y mayor propensión de errores son los resultados, ¿eres líder? La respuesta es obvia. Lo que sí te diré son los problemas que esto genera y que van más allá de solo la falta de una metodología eficiente de trabajo.
Ser multitareas tiene un impacto en la salud. Mentalmente estar en varios lugares a la vez es verdaderamente agotador, especialmente cuando concentrarse en una cosa ya es difícil. Si multiplicas ese esfuerzo mental por cada actividad, la carga que estás dejando caer sobre tu cerebro es abrumadora ¿Sabías que cada vez que pierdes la concentración en general te toma alrededor de 23 minutos retomarla? por eso tu cerebro se cansa.
Sobre esto, Gary Keller y Jay Papasan escribieron el libro Solo una cosa, que es una guía para entender qué es prioridad y cómo distribuir el tiempo de mejor forma, sin saturarse para tener algo que hemos periodo mucho: tiempo libre sin dejar de ser eficaz.
Yo sé que cada vez se siente que el trabajo es más y el tiempo es menos y esa sensación de querer hacer la mayor cantidad de cosas en nuestro horario laboral nos acecha. La realidad es que vivimos en un mundo acelerado.