¿Cómo afecta el proceso de Dilma al sector tecnológico de Brasil?

El exministro del Supremo Tribunal Federal de Brasil, Joaquim Barbosa, dijo que el proceso de “impeachment”, que separa a Dilma Rousseff de la presidencia para ser enjuicida, afectará el posicionamiento del país en el mundo, principalmente en términos de inversiones.

“Los hechos dramáticos de los últimos días interfieren en todo el proceso de incersión de Brasil en el club de países con buena capacidad tecnológica”, dijo el exministro en el VTEX Day que se realiza en la Bienal de Sao Paulo.

El exfuncionario dijo sentirse preocupado por el proceso que enfrenta Rousseff, ya que representa un duro golpe a las instituciones y teme que éstas terminen fragilizadas e inservibles, y así, “¿quién va a tener confianza, quién va a querer invertir?”.

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Según la Asociación Brasileña de Empresas de Software (ABES), Brasil es el país de América Latina y el séptimo a nivel global en donde más se invierte en Tecnologías de la Información (TI), alcanzando 61,600 millones de dólares en 2014.

Barbosa considera que el proceso está legalmente y formalmente bien establecido por la Constitución, pero está conducido por una élite y no por el pueblo.

"El Congreso estadounidense es totalmente hostil a Barack Obama, y no por eso el presidente trata de comprar a los congresistas o los seduce con ventajas materiales, y esa es la perversion que vemos en Brasil o en otros país latinoamericanos, que aceptan y ven normal esta practica”, asegura el exministro.

“No estoy diciendo que la presidenta contractuaba con sectores corruptos, no estoy dieciendo eso, pero si se omitió. Ella se quedó callada, fue ambigua, no supo alejarse del ambiente que la rodeada, no supo ejercer el mando, y termino siendo tragada por el mismo ambiente del imperio”, expresó.

A pesar de este drama, Brasil sigue siendo una de las democracias más importantes del mundo, con 150 millones de electores de los 200 millones de habitantes del país. Y destacó que a pesar de este nivel de participación, el pueblo brasileño no fue consultado ni fue participe de este debate.

Tras una sesión maratónica de más de 20 horas que inició el miércoles, el Senado de Brasil votó para que Dilma Rouseff se separe del cargo . Con esta decision la presidenta se convierte en el primer jefe del gobierno brasileño suspendido de su cargo en más de dos décadas. Rouseff dejará sus funciones mientras dure el proceso de juicio político, que tomaría hasta seis meses.