Palabras clave ayudan a detectar trata de personas en la red

Una palabra como “fresca" puede ser una señal de que una niña está siendo traficada. Encontrarla en un anuncio podría conducir a salvar la vida de alguien.

Los traficantes de personas dependen de internet para anunciar y mantener sus negocios delictivos. La Global Emancipation Network (GEN) recopila y analiza las migajas digitales que dejan atrás para ayudar a encontrar víctimas y detener a los traficantes.

La organización utiliza el análisis de datos para encontrar, estudiar y establecer conexiones entre las personas y la información que comparten en línea. Con socios corporativos como Microsoft, Splunk y Recorded Future, la organización dirigida por voluntarios ha creado una base de datos y una herramienta de búsqueda para encontrar y analizar el tráfico de datos.

“Hay que hacer más por identificar a las víctimas, rescatarlas, esperar que no sean revictimizadas, y luego detener y castigar a esos traficantes”, dijo Sherrie Caltagirone, fundadora y directora ejecutiva de GEN. “Justo ahora, operan con impunidad en línea”.

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Su plataforma externa, llamada Minerva, está actualmente en fase beta, y el plan es, eventualmente, proporcionarla a los proveedores de servicios de policía y de atención a víctimas. Incluye procesamiento de imágenes, análisis de datos, análisis de bitcoin y enriquecimiento de registros públicos. La policía podrá usarla para buscar cosas como anuncios, números telefónicos o sitios web que usan los traficantes.

Internamente, GEN utiliza los datos que recopila para buscar patrones de trata de personas y estudiar tendencias globales. Hay decenas de millones de personas que son traficadas cada año, y según la Organización Internacional del Trabajo, 21 millones de personas son víctimas de trabajo forzado en todo el mundo. La ONU estima que los niños constituyen cerca de un tercio de las víctimas de la trata mundial.

En la actualidad hay un puñado de organizaciones sin fines de lucro que utilizan datos para rastrear el tráfico humano, incluyendo a Thorn y al Proyecto Polaris. Caltagirone dice que GEN es único porque recopila datos sobre todos los tipos de tráfico humano de 22 países y 80 jurisdicciones.

GEN obtiene datos de una variedad de fuentes, incluyendo Craigslist, Backpage y sitios web de la dark web.

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Splunk, una plataforma de análisis de datos y patrocinadora de la organización, donó su tecnología a GEN. Puede indexar la información obtenida y buscar señales sospechosas en los datos mediante el análisis de palabras clave, números de teléfono, datos geográficos o nombres de usuario. Por ejemplo, los anuncios se consideran sospechosos si contienen el mismo número de teléfono, pero aparecen en dos estados diferentes.

La plataforma de GEN también estudia el lenguaje utilizado en la publicidad, incluyendo los emojis o textos incrustados en imágenes. Un signo de una víctima de tráfico sexual menor de edad podría ser palabras como “lolita” y “fresca” en un anuncio. Estudiar el idioma y los datos compartidos en los anuncios también ayuda a diferenciar entre las publicaciones de trabajadoras sexuales independientes y las que probablemente sean víctimas de trata sexual.

Aunque su grupo analiza todos los tipos de trata de personas, es más difícil detectar el tráfico laboral que el tráfico sexual.

Andrew Lewman, vicepresidente de OWL Cybersecurity, dice que los traficantes de personas comienzan frecuentemente en Facebook para anunciar servicios de trafico ilegal, luego cambian a aplicaciones de chat cifradas y usan herramientas de anonimato como Tor para proteger las comunicaciones y la información.

“Una forma en que los traficantes utilizan el Internet y el darknet es para comprar, vender o coordinar a la gente”, dijo Lewman. Como en cualquier negocio, gran parte depende de la web.

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Lewman, quien sirvió en la fuerza de trabajo de tecnología y tráfico del expresidente estadounidense Barack Obama, proporciona índices de datos a GEN. La firma analiza 400 millones de páginas cada pocos meses, dice, la mayoría procedentes de la dark web, y comparte esos datos con GEN. La organización o los servicios policiales o de investigación pueden realizar sus propias consultas en el sistema, como la búsqueda de anuncios o nombres de usuario de una investigación.

“Algunas de las técnicas que realizamos no las publicamos porque no queremos que los traficantes se enteren y dejen de hacer lo que están haciendo que nos permite encontrarlos”, dijo Caltagirone.

Caltagirone, quien ha trabajado en la lucha contra el tráfico humano durante toda su vida adulta, ha pasado cientos de horas hablando con la policía. Recientemente probó la plataforma con un fiscal de distrito estadounidense en una investigación en curso de un foro de revisión de escorts.

El fiscal de distrito quería una lista de algunos usuarios en el foro, en qué otros sitios estaban, en qué actividad criminal participaban y fotos compartidas con sus publicaciones. Entonces las fuerzas policiales podrían hacer una referencia cruzada de los nombres de usuario y números de teléfono con otras ubicaciones en línea.

El grupo también ha estudiado si los cierres de sitios —una técnica tradicional de las fuerzas policiales que hacen inaccesible un sitio web— realmente evitan el mal comportamiento. Su organización estudió los datos de tráfico web después de que Backpage cerró su sección de publicidad para adultos, y encontró que no. Los usuarios simplemente se movieron a otros lugares.

En última instancia, la plataforma será libre para las fuerzas policiales, financiada totalmente por donaciones. Muchas jurisdicciones no tienen presupuesto para pagar herramientas técnicas, ni tienen unidades dedicadas a la trata de personas. Esos son los clientes que Caltagirone quiere atender primero.

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Pero más allá de los departamentos de policía con escasez de dinero, volver libre la plataforma es una cuestión ética.

“Las víctimas de la trata ya han visto sus vidas destruidas, y ya han hecho que la gente haga sumas infames de dinero mediante su explotación”, dijo. “Nosotros decimos que el dinero, literalmente, termina aquí”.