Los 2 desafíos de Elon Musk para conquistar al dragón asiático
Tesla podría estar más cerca de fabricar sus autos eléctricos en China , pero la empresa estadounidense aún se encontrará con barreras en el mercado automotriz más grande del mundo.
La empresa de Elon Musk ha llegado a un acuerdo que le permite fabricar sus autos en la zona de libre comercio de Shanghai y venderlos en China, de acuerdo con el Wall Street Journal y el New York Times.
Tesla se rehusó a confirmar los reportes, pero ha dicho que quiere establecer sus planes para producir autos eléctricos en el mercado automotriz más grande del mundo para finales de este año.
Estos son algunos de los obstáculos a los que se enfrentará la firma pionera de Silicon Valley:
1.
Fuertes impuestos
Supuestamente Tesla planea establecer una planta de manufactura propia en Shanghai, lo que sería único para un fabricante automotriz que opera en China.
El acuerdo podría ayudar a Tesla a reducir los costos de labor y producción, que es un gran punto dado que sus vehículos conllevan un arancel del 50% en China. Pero los autos en la zona de libre comercio de China no se escaparían del alto impuesto por importación pues la planta estaría en una zona de libre comercio.
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Las empresas automotrices extranjeras evitan esos costosos impuestos al asociarse con fabricantes locales para fabricar los autos en China. La desventaja es que esto los obligue a compartir ganancias y tecnología con sus socios chinos, un prospecto poco atractivo para Tesla, que ha guardado cuidadosamente algunas de sus innovaciones.
"Musk seguramente no querrá una asociación, pues de este modo todos los secretos serían conocidos por los chinos”, dijo Li Yanwei, analista con sede en Beijing de la China Automobile Dealers Association.
Pero Musk ha buscado por años una manera de establecer su producción en China para disminuir los costos de Tesla.
"Todas nuestras ventas en China son efectivamente a un alto costo, pero eso se aliviará una vez que nos movamos a la producción local”, dijo Musk a CNN el año pasado, añadiendo que el Model 3 “eventualmente será fabricado en China”.
2. Competencia feroz
China ya es el mercado más grande del mundo para autos eléctricos y ha establecido metas ambiguas para incrementar sus ventas en los próximos años.
El país ya ha probado ser lucrativo para Tesla: la empresa reportó que sus ventas en China aumentaron a más del triple el año pasado, a más de mil millones de dólares. Y casi alcanzó ese total en los primeros seis meses del año.
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Pero se enfrentará a una fuerte competencia de los otros fabricantes automotrices internacionales ávidos de sacar provecho de la adopción de los autos eléctricos en China. Beijing también está empujando a los fabricantes locales a avanzar en la tecnología.
Los analistas sugieren que los principales rivales de Tesla probablemente sean BMW, Mercedes Benz y Audi, quienes están lanzando autos eléctricos de lujo en los próximos años. Estos fabricantes ya se han asociado con fabricantes locales, así que sus vehículos no tendrán el impuesto por importación.
Volvo y su propietario chino Geely quieren tomar parte del mercado de Tesla con Polestae, una marca que relanzaron recientemente como fabricante de autos eléctricos de alto rendimiento. Y los gigantes internacionales como Ford y Volkswagen también planean desarrollar autos completamente eléctricos en China. A diferencia de muchos de sus grandes competidores, Tesla tiene poco reconocimiento de marca fuera de las grandes ciudades como Beijing y Shanghai, dicen los expertos.
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