Primeras impresiones
Para alguien que usa un iPhone 8 (sí, solo 8), el cambio entre uno y otro es notable. La velocidad en la que responde el teléfono e incluso la forma en la que se maneja es un gran avance.
No solo el setup del dispositivo es más veloz que en otras ocasiones, sino también es cierto que tiene mejor batería. En la configuración, una vez que empecé a transferir toda mi información de un iPhone al otro me tomó 20 minutos empezar a utilizarlo, aún cuando inicialmente decía que tardaría al menos 30 minutos solo en la transferencia de la información. Mientras que la batería sí rindió más de 24 horas.
Empecé a probar el iPhone 11 a las 6 de la tarde, 18 horas después estaba al 40% aún y si bien pasó toda la noche sin gran uso, dieron las 8 de la noche y seguía con vida. Durante el día hice varias pruebas con el smartphone en términos de video, fotografía, así que estuvo a su máximo rendimiento por un buen tiempo.
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Otro aspecto a resaltar es la gama de colores que ahora está disponible para el iPhone 11. En mi caso, el dispositivo que estoy reseñando es color morado y la familia tiene un nuevo teléfono en verde (parecido al menta) y una versión más clara del amarillo que ha usado en otras ocasiones, diciendo adiós a los azules y corales. Aún existen iPhone 11 en negro, blanco y RED.