A nivel mundial se producen cerca de 1,300 miles de millones de toneladas de gas de efecto invernadero en la industria textil, esto de acuerdo con un estudio de impacto ambiental de la Fundación Ellen MacArthur. A causa de estos números, la industria textil, sobre todo aquella clasificada como fast fashion, está en la mira de los ambientalistas, pues su impacto se traduce en contaminación tanto del agua, como del aire.
Ya sea por la coloración de las telas, por el estampado de las piezas o por otros procesos de la industria, el sector textil es una de las que más agua gasta y es la responsable de producir el 20% de aguas residuales en el mundo, de acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas, ante esto la tecnología ha buscado opciones, como es la impresión de telas.