Risher también sugirió que aunque recientemente se recomienda mucho usar una conexión privada para navegar de forma segura en la red, con una VPN, esta no es la mejor idea; a menos que la empresa con la que trabajas tenga altas medidas de seguridad para la información que pasará por esas redes privadas.
La firma de seguridad F5 detalló en un comunicado que éstas redes privadas funcionan mejor al manejar tráfico de grupos pequeños que vastas cantidades de IP’s.
“Las empresas necesitan monitorear de cerca los dispositivos VPN, tanto para el uso de la CPU y la memoria como para los cambios de configuración y evidencia de ataques de negación del servicio. Es importante utilizar un cifrado robusto con la VPN. que debe ser resistente a los ataques y estar libre de vulnerabilidades conocidas. Aun así, muchas VPN proporcionan cifrados poco seguros para la interoperabilidad o compatibilidad”, advirtió F5, en un comunicado.
Hacia los meses que quedan de la pandemia y el confinamiento por le COVID -19, Risher advirtió que uno de los focos rojos de las amenazas cibernéticas se ve en la infraestructura de hospitales, pues hoy son parte de los activos clave para sobrellevar la contingencia sanitaria y pueden ser un blanco lucrativo para los hackers.
“Estamos preocupados que esto pueda pasar y estamos haciendo tres cosas de prevención en este sentido. La primera es hacer briefings para gobiernos y empresas para que la gente sepa cómo protegerse; la segunda es identificar grupos de servicios críticos como secretarías de salud o doctores que usan nuestros sistemas y elevar sus configuraciones de seguridad y la tercera es acercar el programa de protección avanzada que que tiene la seguridad más alta; estamos acercando esta opción al sector salud para administrar las IT de hospitales ,por ejemplo , para tener más defensa en este sector”, dijo Risher.