Reseña: WarioWare, Get it Together, la apuesta caótica de Nintendo

Los personajes son muy carismáticos, además de que no se roban protagonismo entre ellos. Ni siquiera el líder de la pandilla, Wario, tiene más importancia sobre los demás y eso es un acierto porque el juego está más orientado a la fiesta entre amigos, quienes tendrán muchas opciones para elegir.

En este título, el usuario debe superar la historia primero para después elegir los más de 200 minijuegos disponibles en el modo Juegopedia, con el fin de compartirlos entre amigos. Sin embargo, terminar todos los niveles podría llevar menos de dos horas.

Por otra parte, la propuesta artística de WarioWare es muy relevante, pues adopta un estilo de animación propio del ánime, en donde la exageración de reacciones y los elementos cómicos toman un papel principal para mostrar una atmósfera de diversión y desparpajo.

Incluso Wario, quien suele ser visto como el enemigo grotesco de Mario, cuenta con elementos de animación japonesa que le quitan esa aura despreciable y, en cambio, lo muestran como el tipo chistoso de la pandilla. Por otra parte, existen otros personajes a quienes el estilo les va bien e incluso los hace ver kawai.

Un punto destacado que tuve con este juego es que cuenta con todos los títulos en español, además de un doblaje latino, lo cual puede resultar significativo para los usuarios más pequeños, pues las instrucciones y acciones suceden muy rápido y se necesita de concentración para cumplirlas satisfactoriamente.

Respecto a las voces de los personajes, estas no tienen un papel medular en la historia, pero se agradece escuchar la calidad del doblaje en un título de Nintendo, tal y como lo hemos experimentado en otros juegos, como Hyrule Warriors: Age of Calamity o el propio Breath of the Wild.

Cabe mencionar que a diferencia de otros títulos de la franquicia, Get it Together no explota las capacidades de Nintendo Switch a través de sus joy-con. Por ejemplo, en Nintendo 3DS WarioWare Gold permitió hacer uso del giroscopio o del micrófono de la consola, pero en este caso no es así e incluso se puede jugar con un mando Pro, pues no exige algún comando de movimiento.

No obstante, esta característica no es mala, pues minimiza la complejidad en la forma de jugar hasta un punto sumamente destacado. Incluso todos los personajes son capaces de superar cualquier nivel y además ejecutan sus acciones tan sólo con un botón y la palanca del mando, por lo que es un título accesible para prácticamente cualquier público.

Un elemento desfavorable en medio de su sencillez es que no existe un modo multijugador online para competir en tiempo real. Esto es negativo, pues ante un título orientado a compartir la diversión entre amigos eso debería ser un estándar.

La única característica online con la que cuenta es la posibilidad de compartir récords en el modo Copa Wario, donde los personajes pueden subir de nivel y si bien obtienen cambios estéticos, esto no representa un elemento diferenciador.