En China, a lo largo de 2021 se generaron cerca de 20 acciones regulatorias sobre la actvidad en línea. Estas se relacionaron con un mayor control sobreredes sociales y sitios de comercio electrónico, la prohibición de la minería de criptomonedas, así como estrictas reglas en el uso de videojuegos para los menores.
Las nuevas reglas en el ecosistema tecnológico tienen el propósito de abordar una serie de prioridades por parte de Beijing, entre las cuales destaca frenar el comportamiento monopolístico de las empresas.
Si bien Tencent ha esquivado el escrutinio directo de Beijing (a diferencia de DiDi) ha tenido que enfrentar las consecuencias de la represión, pues ha arrojado 500,000 millones de dólares de su valor de mercado desde su punto más alto en 2021.
“Por un lado, el crecimiento de nuestros ingresos y beneficios se ha relantizado; por otro lado, podemos usarlo como una oportunidad para cambiar el rumbo hacia un desarrollo de mayor calidad”, dijo el fundador de Tencet, Pony Ma.