Solo un punto de partida
Si le pides a ChatGPT que te diga cuál es la diferencia entre sustentabilidad y sostenibilidad, te escribe un texto de 165 palabras con una introducción, desarrollo y conclusión que bien podría sacar 10 en cualquier tarea.
Por esto, Medina comparte que la pregunta que hay que replantearse es: “¿qué vale la pena enseñar? (...) la escuela no puede seguir separada de la realidad y estas herramientas ya son una realidad”, y, por esto, el pensamiento crítico se vuelve una de las habilidades más relevantes que tienen que desarrollar los estudiantes de ahora.
“Lo que te da es solo un punto de partida y es lo que tenemos que ver. Te permite generar nuevas ideas y ser más creativo, pero si no hay esa parte de pensamiento crítico nos quedamos con lo que nos da el software y ahí es donde truena el asunto”, compartió Medina.
Mariana Anzorena es profesora de redacción y complementa este punto. Menciona que aunque se puede hacer un uso híbrido de la herramienta para eficientar el tiempo, la redacción y la investigación, “el arte no se puede replicar”, y lo que seguirá es ponerle el “toque narrativo humano” que no puede ser procesado por la IA.
“Creo que se van a escribir buenos textos informativos, pero difícilmente textos que tengan una profundidad narrativa, que se acerquen a lo literario, que son unas de las piezas periodísticas que más nos tocan, porque no solo me informan, sino que tocan fibras sensibles”, compartió Anzorena.
Pero ChatGPT no es una herramienta exclusiva para el uso de los alumnos, pues los profesores también pueden sacarle provecho. “Para mi, el ChatGPT me pareció una herramienta maravillosa. Te puede ayudar mucho como profesor. Le puedes pedir que te planee clases, que te responda preguntas o que te inspire en algún tema” compartió Hilda Patiño, catedrática universitaria y consultora educativa.
Sin embargo, parte de las controversias de esta herramienta es que, al generar textos de información recopilada de internet, también puede generar desinformación y replicar discursos de odio, por lo que el pensamiento crítico y el análisis se vuelven habilidades más necesarias que nunca.
La brecha digital en torno a ChatGPT
Otra de las habilidades necesarias que menciona Medina son las técnicas, pues sirven para saber cómo solicitar la información a este tipo de Inteligencias Artificiales, dado que todavía no funcionan con un lenguaje totalmente natural.
Sin embargo, una duda que surge es si estos modelos van a ayudar a reducir la brecha digital y laboral o a incrementarla. “En el sentido original no pienso que lo hayan inventado para aumentar la brecha. Al contrario, es una forma que va a democratizar otro tipo de conocimiento. Sin embargo, en países como el nuestro, sí podría ser un factor que genera brechas porque no todos van a tener acceso”, mencionó Medina.
Y es que, en el caso de México, la brecha digital sigue siendo sumamente alta porque, aunque el 96% de la población cuenta con cobertura a internet y casi el 97% con un dispositivo móvil, la brecha de asequibilidad y de conocimientos tecnológicos sigue siendo relevante.
Además, en la actualidad ChatGPT es gratuito, pero OpenAI ya anunció el nuevo plan de suscripción llamado ChatGPT Plus, que estará disponible por 20 dólares al mes y permitirá a los suscriptores tener acceso general a la herramienta, tiempo de respuesta más rápidos y acceso prioritario a nuevas funciones.
Sobre este tema, le preguntamos a ChatGPT sobre su opinión, y contestó:
“En conclusión, aunque ChatGPT puede ser una herramienta valiosa en la educación, es importante considerar tanto sus descubrimientos como sus limitaciones antes de utilizarlo. Se deben tomar medidas para garantizar que la información proporcionada sea precisa y que se fomente la interacción humana en el aula.”