¿Qué es el Cold Storage (o almacenamiento frío)?
En Facebook se publican al rededor de 350 millones de fotografías al día . Pero la red social no solo almacena fotografías, sino que también tiene que gestionar millones de datos más que, claramente, no podrían almacenar en un simple disco duro.
Por eso, en 2009, empezó un proyecto llamado Open Compute Project para eficientar su almacenamiento de datos y, entre las iniciativas que incluyó, fue el almacenamiento en frío.
Richard New explicó que el nivel de almacenamiento frío es para los datos que no se utilizan de manera frecuente ni activa, como datos de investigación o científicos, datos regulativos o de cumplimiento, expedientes médicos, proyectos antiguos, videos, datos de sensores y datos de fabricación, entre otros.
Aunque estos datos deben estar siempre accesibles, su disponibilidad rápida y alto rendimiento no son prioridad. Algunos de estos datos “fríos” quizá nunca se vuelvan a acceder, mientras que otros podrían ser sumamente valiosos en el futuro para ayudar en los casos de uso del machine learning (ML) o la inteligencia artificial (IA). Por lo general, estos datos se almacenan en medios económicos de alta capacidad como unidades de disco duro (HDD) o cintas.
A medida que las organizaciones utilizan un volumen de datos cada vez mayor, conservar esos datos de manera eficiente y económica a largo plazo se convierte en un desafío.
Pero la consideración más grande cuando se utiliza el almacenamiento en frío es qué tan frecuentemente se necesitará acceder a los datos, o qué tan accesibles deben estar. Los proveedores de nubes pueden tardar horas en acceder a los datos almacenados en un nivel frío, mientras que los datos en un nivel tibio o caliente están disponibles de inmediato, aunque esto tiene su respectivo costo.
De acuerdo con analistas de la industria , al menos el 60% de todos los datos digitales actuales se pueden clasificar en datos de archivo y podrían alcanzar el 80% o más en el 2025.
“Muchas organizaciones tienen una buena razón para explorar el Cold Storage. A medida que más datos se siguen generando —gracias, en gran parte, a las rápidas innovaciones tecnológicas como la IA y el ML— es necesario conservar esos datos, aun cuando no se utilicen en ese momento”, explicó New.
Para optimizar los ahorros de almacenamiento, los datos fríos deben almacenarse en medios de almacenamiento de menor rendimiento y costo. Por ejemplo, las tarjetas SSD pueden utilizarse para almacenar datos calientes, mientras que los datos fríos pueden trasladarse a unidades de disco duro o cintas o migrar a un almacenamiento en la nube que utilice estos medios de almacenamiento.
Además, en el almacenamiento en frío, los discos duros generalmente están en modo de reposo, lo que reduce el consumo energético al mínimo. Asimismo, la eliminación de servidores adicionales reduciría los costos de infraestructura y mantenimiento.
¿Quién ofrece Cold Storage?
Los servicios de nube pública destinados al almacenamiento en frío incluyen Amazon Glacier, Google Cloud Nearline y el nivel de archivo de Microsoft Azure Blob Storage, aunque también existen soluciones privadas, como Western Digital.