En este punto, menciona la especialista, es importante establecer horarios definidos para el uso de los dispositivos tecnológicos, además de evitarlos en los tiempos de comida, a la hora de entrar al baño y también por lo menos un par de horas antes de dormir para no tener un impacto en los ciclos de sueño.
También recomienda destinar un solo lugar para el uso de la tecnología, esto con la finalidad de que la atención tanto del tiempo en pantalla como de las horas fuera de las mismas sea óptimo y, en el caso de los dispositivos, no se prolongue más de lo necesario.
Otro elemento importante para la seguridad en línea es mantener estándares de protección altos, especialmente con los menores de edad, para que eviten los peligros virtuales y enseñarles a identificarlos.
Destaca, también es importante tener una buena higiene digital. Esto quiere decir aprender a organizar la información para crear copias de seguridad de aquellos archivos importantes, pero también para evitar gastar más dinero del necesario en equipos de almacenamiento externo, como memorias USB o discos duros, así como espacio en la nube.
En los dispositivos es posible modificar algunas configuraciones para, por ejemplo, eliminar aquellas aplicaciones que no has utilizado por demasiado tiempo de forma automática. Asimismo, ten cuidado con WhatsApp porque todos los archivos enviados por esta red social también generan consumo de espacio.
Un hábito recomendable para la relación con la tecnología es limpiar de forma periódica los dispositivos inteligentes, ya que se utilizan en tantos lugares y de forma tan continua que contienen bacterias que pueden llegar a ser nocivas para la salud.