Por ello, desde el lunes 23 de junio, los funcionarios deben eliminar la aplicación de sus dispositivos en caso de tenerla instalada. Tampoco la pueden descargar o acceder a ella, ya sea desde sus teléfonos o desde sus computadoras de escritorio. Asimismo, la oficina recomendó al personal optar por otras aplicaciones de mensajería que consideran más seguras, como Signal, iMessage, FaceTime y Microsoft Teams.
Andy Stone, vocero de Meta, señaló que la empresa está en desacuerdo con la decisión de la Cámara de Representantes y destacó que WhatsApp es una plataforma que utilizan funcionarios del Senado sin problemas.
También resaltó que la naturaleza encriptada de WhatsApp es un motivo de confianza, pues proporciona “un mayor nivel de seguridad que la mayoría de las aplicaciones en la lista aprobada por la Cámara de Representantes que no ofrecen esa protección”.
Cabe mencionar que en enero, Meta informó haber detectado y desmantelado una campaña de hackeo dirigida a 90 usuarios de la plataforma en EU, incluidos periodistas. El ataque estaba vinculado a Paragon Solutions, un desarrollador de software espía israelí.
Dicha empresa fue adquirida en diciembre por la firma de capital privado estadounidenses AE Industrial Partners y, según un informe, entre algunos de los clientes de Paragon se encuentran los gobiernos de Australia, Canadá, Chipre, Dinamarca, Israel y Singapur.
WhatsApp vive la misma experiencia que TikTok tuvo hace un par de años, cuando el gobierno prohibió el uso de la app en las agencias federales, debido a preocupaciones en torno a la seguridad y su relación con el gobierno chino.
De acuerdo con las advertencias tanto del FBI como de la Comisión Federal de Comunicaciones, ByteDance, la empresa matriz de TikTok, podría compartir los datos de los usuarios con el gobierno de China y por ello quedó vetada desde las dependencias estatales hasta las fuerzas armadas.